¿Por qué es la frase del día?
Con estas palabras, la excoordinadora general del PDeCAT, Marta Pascal, ha criticado la dureza con la que Puigdemont dirige actualmente las filas del partido y cómo fue apartada por, en contra del criterio dirigido desde Bruselas, apoyar la salida de Mariano Rajoy de La Moncloa.
En una entrevista publicada en el diario catalán Ara, Marta Pascal niega que exista fanatismo en el partido del que formó parte, pero sí que "es muy difícil incorporar un matiz o una discrepancia", algo que ha hecho que la formación se convierta en "un partido de convencidos, algo que ya no me interesaba".
Pascal señala dos puntos de divergencia con la línea impuesta por el expresident Carles Puigdemont: la predisposición a dialogar con el Estado para encontrar una vía alternativa a la confrontación y su intención de "desalojar a Rajoy" del palacio de La Moncloa. Estas dos posturas hicieron que "perdiera la confianza de Puigdemont".
Las intenciones de Puigdemont con Rajoy eran claras: consideraban que el gobierno del PP ayudaba a transmitir mejor el mensaje del independentismo en Europa que uno presidido por la izquierda, que rompía el relato de la herencia franquista en España.
Fuera del partido y con constantes visos de crear una organización alternativa, Marta Pascal no niega cuáles son sus deseos para el futuro del PDeCAT: construir un partido similar al PNV actual, una formación capaz de compatibilizar la política y la defensa de los intereses ciudadanos con "el ideal de la independencia".
Sin embargo, considera que tanto el PDeCAT como JuntsXCAt están realizando una apuesta contraria: "Realizan siempre un planteamiento a partir del bloque, la confrontación y la antipolítica", denuncia. Y señala que no es compatible la actuación que muestran algunos diputados, "que por la mañana están en un atril y por la tarde cortando una carretera".