¿Por qué es la foto del día?
Argentina llora desconsolada la muerte de Diego Armando Maradona. La Casa Rosada, sede del Gobierno, ha abierto a primera hora sus puertas para que los seguidores del futbolista, fallecido a los 60 años, puedan dedicarle un último adiós.
Horas antes del comienzo del velatorio público, llegaba al palacio presidencial el féretro con los restos del mito argentino, rodeado por un fuerte despliegue de seguridad.
Centenares de aficionados han pasado ya por el salón donde descansa el ataúd, cubierto por la bandera argentina y la camiseta de la selección con el dorsal número 10, que Maradona llevó durante toda su carrera. Se espera que hasta allí se acerquen hasta un millón de personas a velarle. En las inmediaciones, colas interminables de ciudadanos aguardan aún para despedir a su ídolo, muchos de ellos tras toda una noche de espera.
La capilla ardiente se desarrolla bajo un fuerte blindaje policial y medidas de seguridad por la pandemia de coronavirus, con algunos incidentes ante la afluencia masiva de personas, en el primero de los tres días de luto decretados por el Gobierno.
Han tenido lugar algunos incidentes en la Plaza de Mayo, donde cada vez hay más seguidores dando lugar a la tensión entre la policía y alguno de ellos que se resistían guardar el orden para entrar el velatorio. Por el momento se desconoce el número de detenidos y heridos, aunque varios aficionados han sido reducidos por las fuerzas del orden.
