¿Por qué es la foto del día?
La Guardia Civil se ha presentado durante la mañana de hoy en la comisaría de los Mossos d'Esquadra de Lleida por órdenes judiciales del Juzgado de Instrucción 4 de la citada provincia catalana. El objetivo era incautar las grabaciones de la centralita de todas las comunicaciones de la región que fueron realizadas por la policía catalana durante la jornada del 1 de octubre.
Asimismo, ha solicitado diversa documentación y el volcado del teléfono de dos mandos de los Mossos. Este juzgado de Lleida ha llevado a cabo esta solicitud tras iniciar una investigación por una denuncia hacia el cuerpo policial catalán debido a su inacción durante la celebración del referéndum ilegal. Esta indagación se encuentra abierta de oficio por desobediencia a las medidas acordadas por la magistrada instructora de la sala Civil y Penal del TSJC tras la querella presentada por la Fiscalía contra el Govern.
Durante esta celebración ilegal de la votación, los Mossos no impidieron la apertura de los colegios y se mostraron impasibles ante las solicitudes de ayuda de la Policía Nacional y la Guardia Civil. Es por ello que una docena de juzgados se encuentran investigando esta actuación de los agentes.
Las órdenes para los Mossos parecían claras: impedir desde el 29 de septiembre al 1 de octubre la utilización de locales o edificios públicos para la preparación de la jornada electoral ilegal. Asimismo, tenían la orden de requisar todo el material relacionado con esta señalada fecha. Sin embargo, durante el 1-O en Lleida ningún colegio electoral cerró y se permitió el referéndum, un hecho que provocó que el juzgado abriera diligencias inmediatamente. La investigación se encuentra bajo secreto sumario.