No corren buenos tiempos -si es que los ha habido alguna vez- para los derechos y privacidad de todos internautas. El escándalo de Facebook solo es la punta del iceberg de lo que realmente hacen las grandes empresas con los datos de los usuarios. Ahora, Google, los dueños de Youtube, se enfrentan a una queja colectiva compuesta por más de una veintena de grupos de derechos infantiles, de consumidores y de privacidad interpuesta ante la Comisión Federal de Comercio por violar las leyes de protección a los niños recolectando información personal y mostrándoles publicidad a menores de 13 años.
El colectivo formado por Campaign for a Commercial-Free Childhood (CCFC) o The Center for Digital Democracy, entre otras, asegura que la plataforma de video más famosa del mundo, YouTube, ha estado almacenando datos como la localización y el número de móvil de los niños sin el permiso paterno pertinente requerido por el documento de Privacidad Online de los niños en Estados Unidos (Coppa). Los dueños de la plataforma alegan que el uso de la mísma es para mayores de 13 años; sin embargo, el colectivo afirma que estos saben del usos de los niños menores de esa edad, según The Guardian.
El colectivo afirma que Google sabe del uso de YouTube por parte menores de 13 años
Josh Golin, el director ejecutivo de CCFC, declaró que, "durante años, Google ha renunciado a su responsabilidad con los niños y familias alegando que YouTube -un sitio que contiene dibujos animados, canciones infantiles y anuncios de juguetes-, no es un espacio para niños menores de 13 años", añadiendo que, "Google se aprovecha de poner estos anuncios dirigidos a niños y debe cumplir con la Coppa. Ya es hora de que la CCFC pida cuentas a Google por su recolección ilegal de datos y sus prácticas publicitarias".
Sin embargo, este grupo demandante aporta más datos al debate ya afirman que YouTube es la plataforma más utilizada entre los niños de 6 a 12 años. Acercándose a la cuota del 80% de usuarios en ese rango de edad; de hecho, Google ya tiene una app desarrollada llamada YouTube Kids que se lanzó en 2015. Esta está diseñada para mostrar un contenido y anuncios apropiados para los niños; además, contrató miles de moderados para una revisión exhaustiva de todos los contenidos de la plataforma para evitar contenido violento y ofensivo.
El 80% de los niños entre 6 y 12 años usa YouTube
Los querellantes afirman que entre los canales más populares de YouTube se encuentran los dirigidos a niños. Entre ellos están 'ChuChuTV Nursery Rhymes & Kids Songs' con más de 15 millones de suscriptores y más de 10 mil millones de reproducciones de videos y 'LittleBabyBum' con más de 14 millones de suscriptores y 14 mil millones de visitas; de hecho, estos declaran que Google tiene una plataforma que facilita a los principales anunciantes insertar publicidad en este tipo de canales.
El propio Jeff Chester, miembro del The Center for Digital Democracy, afirma que, "Google ha actuado de manera engañosa afirmando falsamente en sus términos de servicio que YouTube es solo para personas mayores de 13 años, mientras que atrajo deliberadamente a los menores a un patio de recreo digital lleno de publicidad", y sentencia, "al igual que Facebook, Google ha enfocado sus enormes recursos en generar ganancias en lugar de proteger la privacidad".
Google ha enfocado sus enormes recursos en generar ganancias en lugar de proteger la privacidad
Se une a estas críticas Katie McInnis, consejera política de Consumers Union, diciendo que, "YouTube sabe que los niños están viendo contenido en su sitio, y ha creado canales de contenido específicamente dirigidos a ellos, pero no tiene el consentimiento paterno para recopilar información sobre los menores", y afirma que, "Google tiene la responsabilidad de cumplir con la Coppa y garantizar que los niños puedan ver de forma segura los programas diseñados y promocionados para ellos."
El director ejecutivo de Common Sense, James P. Steyer, incide que Google tiene que mostrar más transparencia con "nuevas políticas más responsables para avanzar en la protección de la privacidad de los niños. Esperamos que Google trabaje estrechamente con nosotros y contacte a los padres con información específica sobre controles parentales, contenido y prácticas de recolección de información en YouTube para que los padres puedan tomar decisiones sobre a qué contenido permiten que accedan sus hijos y cómo proteger su privacidad."
En YouTube mandan un mensaje más institucional que esclarecedor de la verdadera situación: "Nosotros no hemos recibido ninguna queja, proteger a los niños y las familias es una prioridad principal para nosotros. Leeremos todas las quejas concienzudamente y evaluaremos si hay algo en lo que podamos mejorar. Aunque YouTube no es para niños invertimos significativamente en la creación de un YouTube Kids para ofrecer una alternativa especial para ellos".