La vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz, ha propuesto establecer un precio máximo para los precios de los alimentos básicos con el objetivo de limitar los efectos de la inflación sobre la cesta de la compra y el bolsillo en las familias.
Así lo ha manifestado Díaz en una entrevista con El Diario, donde ha criticado que los "oligopolios" en el sector de la alimentación, que ha definido como "cinco grandes distribuidoras que concentran el 50%" del mercado, algo que se hace notar en los precios.
"Esto es un factor de riesgo. Nos vienen advirtiendo de la concentración bancaria, nos vienen advirtiendo del factor oligopolio que tenemos con la energía. Y aquí también pasa esto. A los productores les compran las naranjas a 15 céntimos, y los ciudadanos las pagamos a 1,48 euros. Las patatas se pagan a los productores de nuestro país en torno a 18 céntimos y se están vendiendo a 1,35. El ajo llega a los supermercados con un incremento de casi el 800%. Es una barbaridad", ha criticado.
La vicepresidenta ha indicado que está trabajando en "un acuerdo con las distribuidoras y los consumidores en nuestro país", sobre el que ha propuesto: "Un acuerdo que consista en determinar una cesta de productos básicos, en torno a 20 ó 30 productos, en los que, como hemos hecho con el gas y otras materia, topemos los precios. 20 ó 30 productos que son básicos: la leche, el pan, los huevos, la fruta...", ha propuesto.
Además, ha valorado positivamente el trabajo que está realizando el Gobierno de España para paliar los efectos de la inflación y la crisis energética en el bolsillo de los ciudadanos, pero ha insistido en la necesidad de extender esta labor a la cesta de la compra: "Hay que dar un paso más porque la alimentación es imposible. Lo llevo diciendo, hago la compra con normalidad y la gente tiene razón para estar molesta".
Las marcas blancas se disparan
La pasada crisis económica llevó a un consumidor que apuesta más por las marcas blancas que por las de fabricante, pero el efecto actual de la inflación ha disparado sus precios y se está haciendo notar en el bolsillo de los ciudadanos, que vuelven a apostar con más fuerza por este formato.
La cesta de la compra se disparó el pasado mes de julio un 11,8% respecto al mismo mes de 2021, con una subida de precios del 9,8%, según NielsenIQ. El 42% de los españoles basa su compra únicamente en el precio y busca el producto más económico, según la OCU.
Por este motivo, han aumentado las marcas blancas casi un 14% durante el mes de julio y, con ello, la venta de los productos de fabricante has bajado más de un 2%. El aumento de la demanda en marcas blancas ha aumentado su precio. Los supermercados han incrementado el precio de las marcas blancas en un 11,2%. A pesar de todo, representan el 48,8% del total del carrito de la compra, 2,4 puntos mas que en julio del año pasado, porque siguen siendo más baratos que los productos de fabricante.
