Desde VOX aseguran que la violencia machista no existe, argumentando que las agresiones se comenten sobre todas las personas por igual. Mentira. Podríamos ejemplificarlo con las estadísticas de violencia de género, elaboradas desde 2003 y que revelan que hay más asesinadas a manos de sus parejas (988) que víctimas de ETA (854), a pesar de que la banda ejecutó actos terroristas durante 58 años.
Y es que hay que dejar claro que la violencia machista es un problema estructural y sistemático que amenaza a las mujeres por el simple hecho de serlo. Es decir, existen hombres que persiguen, amenazan, insultan, pegan y matan a las mujeres porque creen ser superiores y las ven como meros objetos. Piensan que pueden hacer lo que quieran con ellas. Que ellos son los que mandan.
Por el momento, las víctimas de la violencia machista sólo se consideran si han muerto a manos de sus parejas o exparejas. Por ello, algunos casos como el de Diana Quer o Laura Luelmo no están recogidos como violencia de género. Pero sí, son casos de violencia machista, porque José Enrique Abuín, 'El Chicle' o Bernardo Montoya ejercieron la violencia contra ellas por el simple hecho de ser mujeres.
Cada vez hay más 'manadas'
Desde que en 2016 el grupo de cinco amigos conocidos como 'La Manada', siempre según la sentencia, abusase sexualmente de una joven de 18 años durante los SanFermines en Pamplona, parece que la prensa se ha hecho eco de las violaciones múltiples que se cometen en territorio nacional y parece ser que incluso los políticos han tomado algo de conciencia sobre esta problemática que existe entorno a los abusos sexuales y violaciones. El pasado 28 de marzo, el ministro del Interior Fernando Grande-Marlaska llegó a decir que esperaba que "no hubiese un efecto contagio" de las violaciones grupales que han trascendido en los últimos meses y calificó los casos de "absolutamente preocupantes". Además, señaló, sin decir nombres, que hay "determinado líderes políticos que minimizan el problema".
Y claro, si tenemos en cuenta las encuestas de las próximas elecciones, el panorama político no nos da demasiadas esperanzas. Si nuestros representantes creen que no existe la violencia machista, la situación para las mujeres irá a peor. Más impunidad para los violadores y maltratadores. Huele a época franquista. Sin exagerar ni un poquito.
Por eso hay que recordar que ni los asesinatos machistas son 'casos aislados' ni tampoco lo son las violaciones múltiples. Desde ese 2016 hasta hoy, 101 'manadas' formadas por más de 350 hombres, entre ellos menores, han violado a mujeres y niñas. En este 2019, un total de 18 mujeres han denunciado agresiones sexuales en grupo. Cinco de ellas tuvieron lugar el pasado año, pero las víctimas no se atrevieron a ir a la policía hasta ahora. La mayor parte de las víctimas son menores, algunas no superan ni los 12 años y las demás no sobrepasan los 20.
Sin embargo, tampoco conocemos la dimensión real de las violaciones cometidas en grupo por hombres porque sólo sabemos de las que se habla en prensa y, aunque el ministro del Interior haya reconocido que es "preocupante", ninguna administración del Gobierno cuenta con estadísticas ni nombres propios. Así que queda muchísimo para que las instituciones reconozcan de manera formal que existe un gran problema y como consecuencia quieran resolverlo.
Quienes sí han reconocido el problema han sido las organizaciones feministas. Desde feminicidio.net a través de Geoviolencia sexual recogen los casos de violencia sexual que han sido denunciados ante las autoridades pertinentes y dadas a conocer por los medios de comunicación. Son los únicos datos que tenemos.
En el 74% de las violaciones en 2018 participaron cuatro hombres
Según los datos de Geoviolencia sexual, en 2016 hubo 17 agresiones sexuales en grupo, 14 en 2017 y 59 en 2018. Las comunidades autónomas en donde se han denunciado más casos son Andalucia, Comunidad Valenciana y Cataluña, en este orden.
Más de la mitad de las agresiones sexuales múltiples registradas en 2018 fueron perpetradas por grupos de dos o tres varones (54,8%). Tres de cada cuatro, por grupos de hasta cuatro varones (75%). La publicación asegura que ese mismo año hubo 356 agresores sexuales y que al menos 87 eran menores de edad, es decir, uno de cada cuatro. De las 111 víctimas registradas desde 2016, una de cada tres eran menores de edad (40 de ellas, el 36%).
La diputada del PSOE Ángeles ÁLvarez compara la situación con lo que ocurría en los 90 con las mujeres asesinadas a manos de sus parejas. En aquella época las administraciones no contablizaban bien los casos y las organizaciones feministas fueron las que se hicieron cargo de poner el problema sobre la mesa. Nadie más lo hizo hasta que el marido de Ana Orantes la quemó viva. Su caso fue un punto de inflexión en la sociedad española. Por eso nos surge una pregunta, ¿qué más ha de ocurrir para que las violaciones en manada sea un tema de Estado y se tomen medidas al respecto?