The Washington Post ha desvelado que la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) ha iniciado una investigación sobre el uso de los cigarros electrónicos que se suma a la ya iniciada paralelamente por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE.UU. (CDC). Debido a una extraña enfermedad pulmonar que han desarrollado más de 500 personas en Estados Unidos que se vincula al vapeo.
Las fuentes locales y el propio periódico estadounidense no han dado más datos, pero han dejado claro que, de momento, se desconoce la causa de la enfermedad que afecta a 38 estados de EE.UU. El único detonante en común es el uso del cigarrillo electrónico, según los investigadores. Desde The Washington Post apuntan a eso y a el uso de productos como el tetrahidrocannabinol (THC), un componente psicoactivo de la marihuana, y nicotina, o bien de manera individual o ambas a la vez. Algunos de los afectados han reconocido que han recurrido al mercado negro o a productos ilegales del THC.
Sustancias nocivas
El problema de usar productos del mercado negro, según apunta el periódico, tras consultar expertos en la materia, explican que la adquisición de estos productos en el mercado negro conlleva ciertos riesgos. Ya que suelen emplear sustancias nocivas como el acetato de vitamina E para espesar el aceite de THC. Sin embargo, los funcionarios a cargo de la investigación, no han identificado alguna sustancia como responsable subyacente de la enfermedad; eso sí, sostienen la hipótesis que es por culpa de una posible exposición química.
Mitch Zeller, director del Centro de Productos de Tabaco de la FDA, ha declarado al periódico que están investigando la "cadena de suministro" y no al consumidor, aunque ha expresado cierta alarma por el uso de sustancias o productos que "contienen THC".
Muertes asociadas al vapeo
El 6 de septiembre sonaron las alarmas cuando las autoridades sanitarias de Estados Unidos informaron de cinco muertes -aumentando a dos víctimas en California- vinculadas al uso de cigarrillos electrónicos. La CDC advierte que el líquido tiene diversas sustancias y compuestos químicos como el diacetilo, además de la nicotina que es igual de adictiva que la del tabaco normal.