Hoy en día, con multitud de compañías de vuelo y diferentes promociones, volar no es tan caro. Destinos tan cercanos como Portugal, Francia, Reino Unido, Alemania, Marruecos o incluso alguna ciudad de España pueden suponer unas simples horas de avión a un precio no muy elevado.
Pero a la hora de viajar, no sólo el vuelo es importante y en ocasiones el hospedaje es más caro que el propio transporte. Pero si ya hay multitud de opciones para volar, compartir coche o pedir un taxi, también es posible alojarse en cualquier país con multitud de servicios existentes.
Dormir en casa de alguien, hacer intercambio de hogar o cuidar de una casa vacía son algunas de las opciones que ofrecen diversos portales y aplicaciones de hospedaje. Los precios son muy interesantes y pueden hacer que viajar ya no sea un impedimento para personas con pocos recursos. Eso sí, para encontrar las mejores ofertas, es conveniente tener libertad de fechas y estar dispuesto a respetar ciertas reglas.
Couchsurfing
El couchsurfing sería, literalmente, como viajar entre sofás de casas ajenas. Es decir, alojarse en los hogares de gente desconocida que vive en el país y dormir en la habitación que ofrecen, no necesariamente tiene que ser un sofá o sillón.
Para viajar solo o en pareja es una opción muy buena pues no cuesta dinero y además permite conocer a gente que ya vive allí y entablar amistad con ellos. Este servicio es muy común entre los turistas más viajados que, en base a sus múltiples experiencias, han encontrado en esta opción un añadido a la hora de conocer el destino y las costumbres del país que visitan.
Obviamente, el dormir en una habitación ajena hace que se tenga que respetar las normas del dueño y las comodidades y libertades no suelen ser las mismas que en un hotel, pero es una forma diferente de viajar y además supone un ahorro económico importante.
Alexandeer Salas, turista habitual y youtuber en su canal Alex Travelbum, apoya esta opción afirmando que renunciar a ciertas libertades para alojarse en couchsurfing merece la pena y le ha permitido dormir gratis en 15 países diferentes. "Estuve con una mujer que fue la persona más agradable y generosa del mundo, y seguimos siendo amigos", afirma Salas sobre su viaje a Nápoles. "Me preparó todos estos platos típicos de Italia y me paseó por toda la ciudad".
Intercambio de viviendas
En comparación al couchsurfing, el intercambio de vivienda ofrece más privacidad e independencia al alojarse también en una casa ajena pero que es enteramente para el viajero.
En este servicio existen múltiples posibilidades: dueños que, en lugar de alquilar habitaciones a gente de la propia ciudad, prefieren ofrecerlas a los viajeros; y otros, sin embargo, lo que buscan es un intercambio de casas para que los dos turistas puedan visitar el país del otro.
Adaptando fechas, ambos viajeros tienen la posibilidad de disponer de un hogar entero para ellos solos y visitar la ciudad o el país con total tranquilidad y comodidad. Además, esta opción ofrece la posibilidad de viajar en grupo o en familia, lo cual es más difícil con el couchsurfing.
Dependiendo del propietario, además de la casa, pueden ofrecer incluso su propio coche. Y otro dato a considerar es que, el hecho de disponer de una vivienda con todas las comodidades, permite ahorrar en comida porque se puede cocinar y no hay que gastar tanto en restaurantes.
Aún así, también hay que respetar ciertas normas pues se está disfrutando de una casa ajena. El mantener todo limpio, no romper nada o tratar las instalaciones con cuidado es algo que se sobrentiende en cualquier turista respetuoso.
Melissa Conn, bloguera de The Family Voyage, es una viajera asidua en este tipo de servicios y usa el portal Home Exchange. "Algunos cobran por la limpieza, otros simplemente dejan una lista de cinco cosas que quieren que hagas antes de irte. Y están también los que sólo dicen 'deja todo limpio'", afirma Conn en base a sus experiencias.
Cuidar de una casa vacía
Esta otra opción es muy sencilla: alojarse en una casa vacía en un periodo en el que los dueños no van a estar, con todo lo que ello conlleva. Este servicio supone que, mientras el turista está alojado en la vivienda, ha de hacer las tareas del hogar, cuidar la casa como si fuera suya y, si los dueños tienen y han dejado a su mascota, sacarla a pasear y darle de comer.
Del mismo modo que el resto, es importante comunicarse bien con los dueños para saber qué tareas son las que se han de realizar y de qué comodidades se dispone: si la casa tiene internet, luz, agua caliente, a cuánta distancia del centro está, etc. Es un modo de hospedarse muy diferente, pero merece la pena probarlo, todo lo que sea vivencias nuevas en los viajes es un añadido a la experiencia.
Los youtubers Nik y Angel Rowel comparten su experiencia en el canal Roadtrip with Nik. Utilizando Trusted Housesitters han viajado a Costa Rica o Estados Unidos con este método que ellos recomiendan.
No obstante, Nik Rowell advierte de que hay que analizar las responsabilidades que requiere la casa antes de utilizar este método de alojamiento: "Si tienes que cuidar una vivienda una semana en Hawai y cuidar de un perro que debes sacar a la calle por la mañana, por la tarde y por la noche, no podrás pasear por la isla todo el día".
Precauciones a la hora de usar estos métodos
El vivir en una casa ajena, usar una habitación de otra persona o intercambiar tu casa supone varios riesgos. Es por ello que existen diversos portales que ofrecen ciertas seguridades mediante opiniones, valoraciones o perfiles de los propietarios y turistas que muestran si la persona es afín a lo que el usuario busca.
Es conveniente realizar ciertas prácticas antes de elegir una vivienda: mirar las fotos y opiniones del perfil del propietario o el turista; buscar las redes sociales del usuario; conocerse previamente y charlar por internet; acordar unas condiciones claras antes de viajar; comunicar a un amigo o familiar dónde está el alojamiento por precaución; o tener un plan B por si falla o no es lo que se esperaba.
Amanda Kelly, propietaria del canal de YouTube Amanda Round The Globe, recomienda tener precaución a la hora de elegir estos servicios. En su viaje a Bélgica cuenta que fue engañada por un hombre que se hizo pasar por una mujer. "Después de esa experiencia me gusta tomar más precauciones, ver comentarios y esas cosas", afirma la youtuber. Por esto, es muy recomendable tener precauciones, para disfrutar de estas experiencias al máximo.
