Liga Skromane, una joven letona de 33 años que residía en Dublín con su pareja, Andrew Jordan, desde hace cinco años, viajó a Kerala, en la India, junto con su hermana para someterse a un tratamiento que le ayudaría a superar una depresión. No obstante, cuando salió de una clase de yoga fue asaltada por dos hombres que, presuntamente, la secuestraron, la violaron y la mataron, decapitándola. Luego abandonaron su cuerpo a orillas de un río.
La joven iba a ser tratada en un centro de rejuvenecimiento curativo de Ayurveda, que es la medicina tradicional india. Sin embargo, pocas semanas después de llegar al país, la joven desapareció. Su pareja, nada más enterarse, cogió un vuelo a la India. Cuando le llegó la noticia de su desaparición él rápidamente lo asoció a que Skromane había sido secuestrada para vender sus órganos. "Apenas he dormido pensando en lo que puede haberla pasado. He caminado por esas callejuelas y hay una gran posibilidad de que haya sido secuestrada. Hay un tráfico de órganos muy alto en el mercado negro de ese país. Alguien podría tenerla en una jaula a 35 grados", explicó en declaraciones recogidas por 'The Sun'.
Pero Jordan estaba equivocado. Su mujer no fue secuestrada por tráfico de órganos, sino que a su mujer, al salir de una clase de yoga, presuntamente dos hombres la asaltaron y la secuestraron para drogarla y violarla. Después la decapitaron y abandonaron su cuerpo a un río.
Más de un mes después
Las autoridades locales localizaron el cuerpo sin vida de la joven a orillas de un río, en pleno estado de descomposición. Al principio, la policía creyó que se había quitado la vida, lo que había sido cuestionado por su familia. Tras realizarle la autopsia, el oficial Manoj Abraham aclaró lo que le sucedió: "(Los asaltantes) la trajeron a la zona del río, la drogaron y abusaron de ella sexualmente, pero ella se resistió y la asesinaron". Esta declaración nos traslada a nuestro país y a una de las frases más comentadas desde la indignación por el juicio de 'La Manada': "Si te resistes, te matan. Si no pones resistencia, nadie te cree y es abuso, no violación".
Los presuntos atacantes son traficantes de drogas locales y uno de ellos tiene antecedentes de abuso sexual hacia hombres y mujeres. Actualmente se encuentran en prisión preventiva, a la espera de que se avance más en la investigación y sean más claros todos los detalles del crimen.
"Lo he pasado muy mal. Mi cumpleaños fue el 20 de abril y esa misma tarde dos hombres encontraron los restos de mi hermana. Ha sido un largo viaje para ella y ha sufrido mucho. Espero que ahora su alma descanse en paz en manos de Dios", alega Ilze, la hermana de Skromane.