'Vestidas de azul', estrenada el pasado 17 de noviembre en Atresplayer, es el título de la segunda parte del universo abierto con 'Veneno'. Tras su arrollador éxito, la nueva producción de Suma Content se sumerge en las vidas de las mujeres trans que protagonizaron el documental del mismo nombre realizado por Antonio Giménez-Rico en 1983.
Basada en el ensayo de Valeria Vegas en el que analiza cómo el cine y la prensa retrataron a la mujer transexual durante la Transición Española, la serie retoma la andadura de la autora, interpretada por Lola Rodríguez, tras los eventos de la primera parte.
Junto a Rodríguez, Paca La Piraña, Alex Saint, Juani Ruiz y Ángeles Muñoz también recuperan sus papeles en 'Veneno', a las que se les unen Rossa Ceballos, Penélope Guerreros, Alma Gormedino, Geena Román, Chloe Santiago y Kyla Òdena para interpretar a Loren Arana, Nacha Sánchez, Josette Sánchez, Eva Pérez, Tamara Muñoz y Renée Amor, las protagonistas de aquel documental.
"Vamos a seguir existiendo"
En mitad de la celebración del estreno de 'Vestidas de azul', que hace un ejercicio de memoria para recuperar la lucha del colectivo trans en una época en la que sus derechos brillaban por su ausencia, se ha producido el primer recorte en democracia de, precisamente, derechos LGTBI y Trans en la Comunidad de Madrid.
Isabel Díaz Ayuso, presidenta de la región, ha hecho uso de su mayoría absoluta en la Asamblea de Madrid, para, aprovechando el día del Sorteo Extraordinario de la Lotería de Navidad, llevar a cabo un peligroso retroceso con el que elimina la libre autodeterminación de género, despenaliza las mal llamadas terapias de conversión y limita aún más la educación sexual en los centros educativos.
Ante esto, las protagonistas de 'Vestidas de azul' han alzado la voz en la premiere denunciando que "al colectivo LGTBI se le utiliza como moneda de cambio". "Falta escucha y empatía, porque esto no solo es política, son vidas, así que esto es inhumano", reclaman. "Vamos a seguir existiendo", subrayan.
