El final de la práctica totalidad de las restricciones hacía pensar en 2022 como un año de cambio con importantes operaciones corporativas. El sector del retail no se mantiene al margen y ya ha registrado la primera gran venta: el gestor francés Amundi ha vendido nueve hipermercados operados por Carrefour al fondo inmobiliario israelí MSDR Investments.
La operación está valorada en 180 millones de euros, según informa el diario Cinco Días, por lo que se trata de la mayor transacción inmobiliaria del sector a lo largo del presente año. El fondo israelí controlará cinco hipermercados en España y otros cuatro en Italia, todos ellos operados por Carrefour, con la excepción de uno en el país transalpino, operado por la cooperativa italiana Coop.
Los centros se encuentra en las localidades de San Sebastián de los Reyes, Alcalá de Henares (ambos en Madrid), Santander, Ávila y en el Rincón de la Victoria (Málaga). En el caso de los hipermercados italianos, se ubican en las localidades de Turín, Florencia, Matera y Ancona.
Intensa actividad
Esta compra se suma a la intensa actividad que el fondo israelí MSDR está llevando a cabo en España. Con esta operación, suma 123.000 metros cuadrados a los 63 activos con los que cuenta la compañía en nuestro país. Recientemente, incorporó a su cartera otros cuatro supermercados catalanes también operados por Carrefour, además de 27 supermercados que Mercadona le traspasó por más de 100 millones de euros en verano de 2021.
El sector vive cada vez con mayor frecuencia este tipo de operaciones, aunque se trata de la primera significativa que se produce en el área de los hipermercados. A pesar de todo, Carrefour España vendió en septiembre siete hipermercados por 93 millones a Realthy Income, un fondo de inversión estadounidense.
Tras las ventas, Carrefour cuenta en España con una red de 206 hipermercados y más de 1.150 supermercados. Su división inmobiliaria, mientras tanto, acumula 119 centros. Desde el inicio de la pandemia, los inversores han mostrado un elevado interés en el sector de la alimentación. Sin embargo, las compras y ventas responden a dos razones principales: mientras los vendedores necesitan recursos para expandirse y digitalizarse, los compradores identifican el retail como un sector defensivo en un momento especialmente incierto.