Un incendio en la Grenfell Tower de Londres, un imponente rascacielos de 27 plantas en el barrio de Lancaster West, ha provocado seis muertos y al menos 50 heridos, según han relatado las autoridades.
La cifra de víctimas mortales no se ha concretado, ya que las investigaciones continúan en marcha. Lo que por el momento sí que se ha confirmado es que las llamas comenzaron en la segunda planta y rápidamente se extendieron hacia la planta 24, la última.
Todo el edificio comenzó a arder como si de una antorcha se tratase, recordando a las escenas vividas en Madrid cuando ardió la torre Windsor, aunque en aquel acontecimiento no hubo que lamentar daños personales.
Las llamas provocaron que muchas personas se quedasen atrapadas en el interior de sus casas, sin posibilidad de escapar, ya que la torre albergaba, prácticamente en su totalidad, viviendas y apartamentos.
La jefa de los bomberos se ha mostrado completamente impactada ante lo sucedido: "Este es un incidente sin precedentes. En mis 29 años como bombera nunca había visto nada de esta magnitud", ha detallado antre los medios.
Según ha detallado la líder de la brigada, el número de víctimas mortales no se puede precisar por el simple hecho de que aún no se han removido los escombros, pero sí que hay constancia de que las llamas han provocado varias muertes.
Muchas de las víctimas intentaron mandar señales de luz con las linternas a través de la ventana de sus casas para que los servicios de emergencia les rescatasen. Pero en muchos casos fue imposible: las llamas estaban devorando toda la construcción con gran virulencia.
Las llamas comenzaron a la 01:15 de la madrugada, hora local, y los bomberos tardaron seis minutos en personarse en el lugar. En total, cuarenta camiones y 200 efectivos. Cuando llegaron, iniciaron un plan de evacuación mientras intentaban sofocar las llamas.
Fallaron muchas cosas
El incendio se podría haber evitado completamente, o así al menos lo aseguran los vecinos del edificio, que alertaron a las autoridades en el pasado y nadie quiso ofrecerles una solución.
Además, las alarmas antiincendios no saltaron en cuando comenzó el humo, por lo que no se pudo realizar una intervención mucho más efectiva. Un vecino del inmueble ha relatado este hecho: "Oí que la alarma de humo de mi vecino se apagaba, y no pensé nada. Entonces escuché a un vecino gritar. Tengo suerte de estar vivo porque hay gente que no ha salido del edificio".
Los afectados también han criticado la falta de información y coordinación de las autoridades. Otro vecino lo relataba: "La Policía no ha venido a hablar con nosotros. No hemos podido darle a nadie ni siquiera nuestros nombres".
Ahora, falta que las autoridades localicen e identifiquen los cuerpos de las víctimas, ya que muchos familiares se encuentran con angustia ante el desconocimiento de la situación de sus allegados.
