La Generalitat Valenciana, a través de la nueva ley de Indentidad de Género, ha desarrollado un protocolo que obliga a los centro educativos a permitir que los menores transexuales acudan al baño o vestuario del género con el que se identifican y no del que hayan nacido. Así mismo, los profesores y el alumnado deberán referirse a los menores por el nombre y la adscripción de género que hayan elegido. También se garantiza la libertad de vestimenta.
Este nuevo protocolo tiene como objetivo 'despatologizar' la transexualidad, es decir considerarla como una expresión y elección libre del ser humano, en lugar de un trastorno. Además, una de las metas principales es prevenir el acoso escolar que se deriva de estos casos, a través de pautas que ayuden a "los equipos directivos y los orientadores e los centros a tratar la identidad de género, la expresión de género y la intersexualidad".
El consejero de Educación, Vicent Marzà, ha declarado que "la educación valenciana aspira a convertirse en un espacio de inclusión en que todas las personas que forman parte puedan desarrollar su identidad libremente y sin trabas", según recoge El País.
Cada centro deberá elaborar su propio proyecto
Esta medida tiene como ámbito de aplicación los centros públicos, aunque cualquiera podrá adscribirse a los protocolos. La Generalitat tan solo ha elaborado las líneas generales de estos, y cada centro deberá crear su propio proyecto, siempre desde "los principios de respeto a la libertad individual y los derechos de indentidad de género y orientación sexual". Esta es una gran iniciativa, pues implicará a los centros de una manera más personal, haciéndoles ver que son una parte fundamental del proceso. Además, estos podrán adaptar las directrices del proyecto a sus necesidades.
Esta nueva medida entra hoy en vigor, a través de la publicación del protocolo en el Diari Oficial de la Generalitat Valenciana (DOGV).