El inicio del vídeo no da buena cuenta de lo que va a suceder, pero si lo ves completo podrás concluir que este padre es todo un ejemplo a seguir.
Todo ha ocurrido en Ciudad de México, donde el padre se encontraba paseando, cuando descubrió algo que no se esperaba: el novio de su hija estaba sentado en un parque, a plena luz del día, dándose el lote con otra chica.
El hombre se alejó de ellos y se puso a tramar su venganza: no quería que el joven 'se fuera de rositas' después de haber dejado a su hija con una cornamenta que le impedía cruzar la misma puerta de la plaza de las Ventas y la puerta de la Catedral de la Almudena
Con muchas ansias de venganza, el padre tomó la siguiente decisión: coger su teléfono móvil, activar la cámara y dirigirse al joven para darle toda una lección.
Decidido, el padre empieza a grabar sus pasos hasta que llega al lugar del 'crimen'. Allí está la parejita dando rienda suelta al asunto, cuando el padre, sin ningún tipo de pudor, les saluda 'amigablemente': "Hola, ¿cómo están?".
El joven, que cuando oyó la voz de este hombre 'los tuvo que tener de corbata', puso la misma cara que Putin cuando se activa su alarma ¡Gay, Gay, Gay!, dejó de besarse con la chica y se quedó mirando sin saber muy bien cómo reaccionar ante tan inesperado acontecimiento.
El padre, sin embargo, tenía muy claras qué cuatro 'cositas' tenía que decirle al ya ex de su hija: "Te estoy grabando. ¿Así es como juegas con mi hija?", le espeta, mientras el joven agacha la cabeza pero muestra intención de defenderse.
"Mejor te callas", le recrimina, mientras señala a la 'otra': "También está jugando contigo", le advierte. Sin embargo, el plato fuerte llega en este momento: "Eres peor que basura", le recrimina al chico, mientras que a su amante le dice: "y tú también", a pesar de que un segundo antes le había asegurado que también estaba jugando con ella.
"Ten vergüenza, perdida", le suelta a la chica, mientras que la echa y ella se va a su casa con un poquito, solo un poquito, de vergüenza. Mientras tanto, el joven permanece sentado en el banco con la misma cara de alegría que cuando Coral Segovia supo que no iba a acudir a Eurovisión (sí, han pasado muchos años, pero ese momento televisivo fue muy épico).
Aquí es donde llega el punto dramático cumbre, en toda una escena que podría dar para una serie de quince temporadas, un spin-off y una obra de teatro. 'Pasión de Gavilanes', podría ser el título, por elegir algo nuevo, refrescante y original.
Es entonces cuando le señala y le dice: "No te quiero que te vuelvas a parar con mi hija. No te doy una no más, porque soy cristiano. Pero de verdad te lo mereces", le espeta. El joven, mientras tanto sigue en el banco sentado y aquí, tristemente, se corta la grabación. Tenemos curiosidad de saber qué pasó después. Queremos un spin-off. YA.