No ha sido una semana fácil para los Reyes. Felipe y Letizia visitaban Cataluña en un clima hostil para entregar los premios Princesa de Girona, acto al que no ha acudido ningún miembro del Gobierno catalán, incluido su presidente, Quim Torra. En su discurso, el Rey apostó por una Cataluña "de todos y para todos, abierta y plural", ante la atenta mirada de la delegada del Gobierno en Cataluña, Teresa Cunillera, y el ministro de Ciencia y Universidades, Pedro Duque, únicos representantes políticos que asistieron.
No obstante, la imagen que ha desatado la polémica en redes sociales se ha producido antes de que diera comienzo la ceremonia, en la llegada de los Reyes al centro de eventos del Celler de Can Roca.
Felipe VI sale primero del coche oficial y espera pacientemente a Letizia, que porta un paraguas azul debido a la tormenta de verano que tenía lugar en ese mismo momento. Al llegar a donde está el monarca, Letizia sigue avanzando, en busca de un refugio. En ese momento, Felipe ofrece coger el paraguas, no sabemos si como un acto de caballerosidad algo estancado en el tiempo o simplemente porque él tampoco quiere mojarse.
Parece que es lo segundo cuando Letizia se niega a darle el paraguas y ofrece levantarlo, para que los casi dos metros de estatura de Felipe VI tuvieran cabida. El Rey agacha la cabeza pero rápidamente rehúsa su oferta porque ya está preparada la recepción.
Llegada de los Reyes a la ceremonia de entrega de los Premios de la Fundación Princesa de Girona #PremisFPdGi@A3Noticiaspic.twitter.com/p2FHoyOZAU
— Antena3Catalunya (@A3Catalunya) 28 de junio de 2018
¿Otro desplante de la reina?
Parece un gesto de firmeza e independencia por parte de la Reina, aunque muchos lo han interpretado como una falta de respeto a su marido, con quien ha tenido sus más y sus menos a lo largo de todos estos años.
Es probable que todas estas críticas tengan un denominador común: el feo a la reina Sofía durante la misa de Pascua celebrada el 1 de abril en la catedral de Palma de Mallorca. Aquella escena hizo caer en picado la reputación de Letizia, como se pudo ver en los siguientes actos públicos a los que acudió. A pesar de que intentaron forzosamente dar normalidad a la relación, ahora se mira con lupa cada paso que da la reina, buscando el mínimo motivo para criticarla. Parece que esta vez lo han encontrado.
