En un discurso de urgencia para abordar la alarmante impunidad con la que algunos sectores de los forofos del fútbol están reproduciendo discursos racistas, machistas y homófobos, Alexander Ceferín, presidente de la UEFA, ha querido abordar el tema sin tapujo alguno. Y es que inlcuso se han llegado a ver símbolos fascistas y neonazis en los estadios de fútbol: "Los jugadores no revelan su orientación sexual por miedo a la grada", confesaba Ceferín.
La Equal Game Conferece, celebrada este curso en Wembley, tiene como principal seña eliminar todo tipo de discriminación en el mundo del fútbol: "Estoy avergonzado de que en 2019 tengamos que celebrar una conferencia para promover la diversidad", decía Ceferín, que además, culpó a muchos políticos de relativizar esta intolerancia y violencia: "Es preocupante ver a los líderes mundiales y políticos quitar peso a los incidentes racistas y discriminatorios".
Casos sonados
La UEFA impulsa una campaña que lucha contra el trato discriminatorio en el mundo del fútbol bajo el nombre de Equal Game. El jugador inglés Liam Davis, del Cleethorpes Town FC, relató su historia, cómo salió del armario en 2017. Su revelación tuvo una buena acogida en el club, de "una maravillosa ciudad pequeña (donde) la gente es muy cercana", comentaba éste.
"Es imposible que un futbolista se declare homosexual por la reacción de los aficionados", comentaba el jugador del Arsenal Héctor Bellerín. El español habló sobre este tema en una entrevista en 2018. El jugador, además, siempre se ha declarado abiertamente heterosexual pese a muchos insultos recibidos por su cuidado en la manera de vestir y el pelo.
"La gente me ha llamado lesbiana por dejarme el pelo largo, y he recibido otros muchos insultos homófobos, algunos en los estadios, pero la mayoría de ellos en las redes sociales. He aprendido a protegerme de ello, pero puede llegar a afectarte. De vez en cuando tienes dudas. La gente debería poder expresarse, se es más feliz así", declaraba el lateral derecho.
Lo que queda claro es que la UEFA se ha posicionado a favor de los futbolistas gays, pero si algo se sabe es que el camino por recorrer aún es largo. En las gradas será complicado de subsanar pero, reconocer que esto es un problema, es el primero de los avances.
