La Comisión Europea ha abierto un procedimiento de infracción contra Hungría por la aprobación de la ley que prohíbe hablar sobre homosexualidad en los colegios, mientras que aplica la misma medida contra Polonia por mantener las denominadas como 'zonas libres de ideología LGTB' en un centenar de autoridades locales.
La UE denuncia la discriminación contra el colectivo LGTBI que implican estas políticas y ha enviado a ambos países sendas cartas de emplazamiento en las que muestra su preocupación. Además, ofrece un plazo de dos meses para cambiar la situación en la que se encuentran ambas naciones.
Este es el primer paso de un procedimiento que podría llegar hasta el Tribunal de Justicia, así como terminar con la adopción de sanciones financieras contra los países denunciados por la Comisión Europea por sus políticas discriminatorias con el colectivo LGTBI.
La institución ha emitido un comunicado donde asegura: "La igualdad y respeto por la dignidad y los derechos humanos son valores fundamentales de la Unión Europea [...] La Comisión utilizará todos los instrumentos a su alcance para defender estos valores".
Dos medidas en el objetivo
La Comisión Europea ha situado en el objetivo dos medidas concretas adoptadas por los ejecutivos de Budapest y Varsovia. En el caso de Hungría, el Gobierno comunitario cuestiona la ley que prohíbe o limita el acceso a contenidos que promueven, según el texto, "la divergencia de la identidad con relación al sexo de nacimiento".
La institución señala que la protección de los menores de edad es un interés público legítimo, pero apunta que Hungría "no ha explicado por qué la exposición a contenido LGTB puede ser dañino para su felicidad".
Por su parte, en cuanto a Polonia, la Comisión Europea señala que actúa en contra de la inacción del Gobierno frente a las denominadas como 'zonas libres de ideología LGTB'. La UE considera que estas 'zonas', que fueron implementadas en 2019 por varias municipalidades y regiones de Polonia, se pueden considerar como una "violación de la legislación europea sobre no discriminación con base en la orientación sexual".
Todo ello se suma a que, según la Comisión, Polonia ha ignorado varias peticiones para ofrecer detalles de la base legal de esas zonas y de esta forma ha violado su compromiso de "cooperación sincera" con las instituciones europeas.