Los disturbios provocados por los ansistema en Barcelona tras la sentencia del procés están provocando todo tipo de desperfectos en las calles de la capital catalana y el mobiliario urbano, así como decenas de comercios y negocios que se están viendo gravemente afectados por sus consecuencias.
En medio de la debacle que acontece en Cataluña desde el pasado 14 de octubre de 2019 no solo se encuentran los CDR y los separatistas violentos, sino que hay parte de la población que condena lo ocurrido y ayuda a solucionar o evitar más problemas, o al menos lucha por abandonar la violencia y salir a la calle de forma pacífica y sin producir altercados. Este es el caso de la bailarina Sandra Kisterna, que ha protagonizado una de las escenas más polémicas de los altercados en la ciudad condal. No fue gracias a ninguna barricada, tampoco por su ideología o por apoyar a un bando u a otro, sino por lo bien que se le da hacer twerking'
Su título de campeona nacional de twerking y los premios que ha recibido por ello la consolidan como una bailarina de excepción en el estilo, algo que ha querido dejar plasmado en la memoria de todos los españoles que siguen con detenimiento la actualidad de las protestas por las condenas a los procesados por el referéndum ilegal del 1 de octubre de 2017.
No es la única
Si bien ha conseguido ser el centro de todas las miradas tras ponerse en frente de una de las tantas hogueras que los independentistas han encendido en Barcelona, haciendo gala de lo bien que se le da mover las nalgas, su "forma de protesta" no ha convencido a muchos. Ella, sin embargo, ha querido defenderse en su perfil de Instagram explicando porqué lo hizo: "Esto no es ningún tipo de burla y mucho menos quiero ofender a la gente que sale a luchar por sus derechos".
"Soy consciente de que no todo el mundo lo tomará como bien, pero tengo libertad de expresión como todos", expresaba la influencer, condenando la violencia de la que no quiere ser partícipe. "Lo que vi ayer por la noche en Barcelona era devastador, mi querida ciudad arruinada, donde solo reinaba el caos. Y quiero decir también que había muchos niños que no protestaban por sus derechos, sino que les hacía gracia ir corriendo por todas partes y romper todo cuanto se encontraban a sus pasos, y eso sí que es triste de verdad", condenaba la barcelonesa de origen ucraniano-dominicano, afincada en la ciudad desde que hace años abandonara la exrepública soviética y en la que se gana la vida como profesora.
"Aclarado todo esto, solo me queda deciros que por favor sigamos luchando pero sin tanta violencia porque estamos destrozando nuestra ciudad", palabras con las que terminaba el escrito de su publicación, criticado a la par que alabado del que numerosos informativos y programas de televisión ya se han hecho eco. No ha sido la única que ha protagonizado rocambolescas y grotescas imágenes, entre ellas también está la modelo rusa Elena Rybalchenko, conocida como la mamá fitness o las de varias parejas de recién casados que atraviesan las calles expresando su más que evidente felicidad en selfis.
Rybalchenko por su parte, quiso destacar con otra publicación el hecho de que ella también fue parte y considera que lo que la gente buscar "dividir constantemente a todo el mundo". "Cada división y cada guerra trae dolor. El poder está en la unidad y la sinergia. Es mejor encontrar mil razones para unirnos que dar con una razón para la discordia. Espero que Barcelona encuentre la paz", sentenciaba.