Un turista estadounidense, que se acercó intencionadamente a la isla de Sentinel del Norte con un grupo de pescadores locales, fue asesinado por los sentineleses, la tribu aborigen aislada en este islote de la India.
Tal y como afirman algunos medios de la zona, los habitantes le dispararon flechas al poco de pisar tierra, aunque la policía desconoce cómo fue exactamente la muerte del turista. Las autoridades fueron alertadas gracias a un "amigo local" con el que contactaron los pescadores que acompañaban al norteamericano.
Una isla incomunicada desde hace milenios
La isla de Sentinel del Norte, situada en el archipiélago de Andamán, India, suele recibir a los visitantes del mismo modo, pues la tribu que allí reside vive aislada del resto del mundo y no permite ningún contacto exterior.
Los cálculos establecen que los sentineleses viven allí desde hace 65.000 años, es decir, más de 50.000 años antes de la invención de la escritura o la construcción de las pirámides. La incomunicación con el resto del mundo desde hace tantos milenios podría ser la explicación a su escasa evolución, tanto social como físicamente.
Sus rasgos son marcadamente africanos, en contraposición a los de los habitantes de las regiones asiáticas vecinas. Por otro lado, aún parecen estar en el Paleolítico, pues no se han descubierto indicios de escritura, agricultura o fuego.
Sin embargo, algo que sí se descubrió fue el paso de la Edad de Piedra a la Edad de Hierro. Cuando en 1981 un barco chino naufragó en sus costas y los tripulantes fueron atacados, vieron que sus armas eran de piedra y madera. Gracias a un helicóptero se pudo rescatar a los supervivientes. En los siguientes encontronazos con la tribu, las armas que utilizaban ya tenían puntas de metal, por lo que podría decirse que su transición de la piedra al hierro fue hace casi 4 décadas.
Algunos visitantes a la isla
Hace casi 2.000 años, el astrónomo grecoegipcio Claudio Ptolomeo hablaba de que había "una isla de caníbales" en medio de la bahía de Bengala, mar donde se sitúa Sentinel del Norte. Pero los encuentros demostrados registran al canadiense Maurice Vidal Portman como el primer visitante extranjero en esta isla perdida.
En 1880 desembarcó con la Marina Británica en la isla con el fin de secuestrar a uno de los sentineleses para llevárselo al mundo exterior y enseñarle inglés. De este modo, podría contarles lo que pasa en la isla desconocida. Los habitantes parece que vieron sus intenciones y, en lugar de atacar como hacen siempre, se escondieron en la selva. Pero Portman logró llevarse a dos ancianos y cuatro niños que pasaban por la playa.
Los dos sentineleses más mayores murieron en el viaje de vuelta, probablemente por alguna enfermedad del mundo exterior a la que no son inmunes debido a su aislamiento. Los niños, sin embargo, regresaron con regalos británicos y poco se pudo documentar sobre su isla o su idioma. Quizá fueron devueltos por el peligro biológico que les suponía estar en el mundo exterior.
Más recientemente, se lograron dar encuentros pacíficos. En 1991 el antropólogo indio Triloknath Pandit consiguió pisar las playas de la isla y dar regalos a la tribu aborigen. Pero en 1997 volvieron a su postura más hostil, y cualquier persona que pisaba sus tierras era asesinada.
La India no socorrerá a los que visiten la isla
Desde 1997 el gobierno indio prohibió la entrada y cualquier contacto con Sentinel del Norte. Tras la experiencia de la tribu Jawara, habitantes de una isla vecina que casi se extinguió por culpa del turismo, La India pretende así que no se repita esta desgracia. Además, el país se lava las manos si sucede alguno de estos contactos, pues afirman que no tomarán parte si alguien es asesinado por saltarse esta norma.
Como ya se ha demostrado, estas visitas del mundo exterior podrían suponer un riesgo para los indígenas, pues no han desarrollado defensas naturales ante muchas enfermedades que ni siquiera sabemos que portamos. Los sentineleses claramente muestran su desagrado a estos invitados no deseados, pues además de atacarlos utilizan siempre el mismo gesto: se llevan las manos a los genitales.
El tsunami de 2004
Sentinel del Norte se vio afectado por el tsunami de 2004, pues se encuentra en el océano índico. A pesar de ser considerado como uno de los mayores tsunamis registrados en la zona, La India descartó enviar ayuda al islote por miedo de ser recibidos violentamente.
Pero tres días después de la catástrofe, un helicóptero sobrevoló la zona para conocer el estado de la tribu. Afortunadamente muchos seguían vivos y con energía, pues no dudaron en atacar como de costumbre. Aún así, el seísmo afectó a parte de la forma y topografía de la isla.
