Tres jóvenes de 16, 17 y 18 años han sido detenidos en la localidad de Benicarló (Castellón) por, supuestamente, secuestrar y torturar a un hombre de 30 años. Los acusados grabaron todos los hechos y emitieron la señal en directo a través de Instagram.
El Juzgado de Instrucción número 4 de Vinaròs ha decretado prisión provisional para todos los acusados. El juez aprecia los posibles "delitos de detención ilegal, extorsión y amenazas, a falta de una ulterior calificación conforme avancen las diligencias", según precisaron fuentes del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana (TSJCV) al diario Levante-EMV.
Solo uno de los acusados, el único mayor de edad, permanece en prisión. Los otros dos, como menores, han pasado a disposición de la Fiscalía de menores. La víctima, por su parte, permanece ingresada en el hospital General de Castellón donde fue derivado desde el centro hospitalario de Vinaròs por la gravedad de sus heridas.
El hombre llegó con traumatismos craneoencefálicos severos, así como varias costillas y una vértebra rotas. Además, el hombre secuestrado tiene lesiones importantes en un brazo que podrían hacerle perder una mano.
Los vecinos de la víctima, que se han mostrado consternados, aseguran que era una persona introvertida y poco comunicativa, pero "muy correcta" y que nunca había tenido problemas con nadie. Era una persona muy reservada y había padecido, según comentan, algún episodio reciente de depresión.
Los jóvenes no son residentes del barrio, pero sí lo conocían de cierta manera porque habían ocupado alguna casa cercana. El hombre tenía la costumbre de dejar la puerta abierta al ir a tirar la basura, por ello, los vecinos creen que los agresores podrían haber aprovechado ese momento para acceder al interior. También ven probable que accediesen después de llamar al timbre.
Lo cierto es que la cerradura no está forzada y que la Guardia Civil fue alertada cuando una persona se topó con el vídeo del secuestro en Instagram Direct y lo denunció de inmediato. Los agentes, que analizaron el contenido de inmediato, consiguieron localizar la casa tras analizar con detalle todo el contenido.
Sospechan que detrás podría haber un móvil económico
Los investigadores sospechan, a estas alturas, que detrás de todos estos hechos podría esconderse un móvil económico. Los agresores podrían tener la intención de apoderarse de un dinero que la víctima escondía en el banco. Con el objetivo de conseguir todo ese efectivo, retuvieron a su víctima desde la madrugada del domingo hasta las cuatro de la tarde del día y le golpearon por todo el cuerpo con una llave inglesa y una batidora industrial, que mostraron luego ensangrentadas en el directo de Instagram.
En el vídeo, los atacantes aparecían completamente enajenados y la víctima, llorando suplicando clemencia. Los agresores gritan y amenazan de muerte, le acusan de ser un pederasta y que van a acabar con su vida porque ha violado a una niña, un extremo sobre el que no existe ninguna evidencia y que es completamente falso. Además, aparecen consumiendo algún tipo de droga fumada.
Los agentes sorprendieron a los adolescentes con la víctima en volandas y gravemente herida. Uno de ellos llevaba en ese momento una cartilla bancaria propiedad del secuestrado en las manos, otro hecho que ha fortalecido el móvil económico del crimen.
