Un cargador de teléfono móvil con fallas técnicas podría haber sido la causa del incendio ocurrido ayer por la mañana en la residencia de ancianos concertada Juan XXIII de Aravaca (Madrid).
Dos ancianas, de 90 y 93 años, perdieron la vida en el incidente, mientras que otra de 80 años resultó gravemente herida y 16 residentes más fueron llevados al hospital con lesiones leves. Según los informes de los trabajadores de la residencia, el incendio se inició en la habitación donde se estaba cargando un teléfono móvil con un cable defectuoso, lo que provocó el fuego que afectó a la estancia de la primera planta donde dormían Lucía, de 90 años, Isabel de 93, y otra anciana.
Algunos empleados indicaron que el cargador averiado pudo haber causado un cortocircuito, dando inicio a las llamas.
Todo ocurrió rápido
El fuego se propagó rápidamente por la habitación, dejando atrapadas a dos de las mujeres. Los primeros en responder fueron cuatro agentes de la policía municipal y dos agentes nacionales, quienes solo lograron rescatar a una de las tres ancianas. Lamentablemente, no pudieron salvar a Lucía e Isabel, quienes perdieron la vida debido a la inhalación de humo y quemaduras.
La Policía Nacional está investigando la hipótesis inicial de un origen accidental del incendio. Equipos de Policía Científica fueron enviados a Aravaca para examinar la habitación donde se inició el fuego.
Los bomberos también están investigando si el sistema de protección contra incendios de la residencia funcionó correctamente. Según el Código Técnico de la Edificación (CTE), los centros para personas mayores deben contar con sistemas de detección temprana de incendios, rociadores automáticos de agua y sistemas de evacuación de humos para garantizar la seguridad de los residentes.
En el momento del incendio, la residencia, con capacidad para 40 personas, albergaba a 38 ancianos. El servicio de emergencias 112 recibió la llamada poco antes de las 7:00 horas y acudieron al lugar la Policía Municipal, los Bomberos del Ayuntamiento, la Policía Nacional, el Samur, Cruz Roja y el Summa. El jefe de guardia de los Bomberos del Ayuntamiento de Madrid, Roberto Moreira, confirmó que el fuego se limitó a la habitación y que el humo se dispersó por todo el edificio.
Además, la supervisora de guardia del Samur, Isabel Casado, explicó que los equipos de emergencia realizaron maniobras de reanimación cardiopulmonar en los heridos graves hasta que, lamentablemente, se confirmó el fallecimiento de dos de ellos.