A día de hoy, muchos trabajadores pueden pedir una compensación del IRPF debido a un error relativo al ejercicio económico de 2019. Se trata de una compensación que afecta a aquellos que ejercieron como empleados de banca entre el período de los 60 a los 70.
Dicha compensación se ofrece por haber tributado de más en el IRPF por su pensión en estos últimos años, por un fallo reconocido por la Agencia Tributaria.
Requisitos para cobrar la compensación
Haber ejercido como trabajador de banca no es la única condición para pedir esa compensación. Es necesario también que el contribuyente sea una persona de Gipuzkoa y que haya presentado la declaración de la renta durante los años 2019, 2020, 2021 y 2022.
Por otro lado, para recibir esta compensación será necesario que los afectados reciban la pensión de jubilación, además de haber ejercido antes de una fecha muy concreta, el 31 de diciembre de 1978, momento en el que se finalizó el modelo de mutualidad existente antes de entrar en funcionamiento el modelo de pensiones actual.
Este cambio llega tras una sentencia del Tribunal Supremo en la que se modificaba el criterio de la Agencia Tributaria y se reconocía a los pensionistas que cotizaron en la Mutualidad Laboral de Banca el derecho a disfrutar de una reducción fiscal del 100% por lo cotizado hasta el 31 de diciembre de 1966, y de un 25% por lo cotizado entre el 1 de enero de 1967 y el 31 de diciembre de 1978.
Según los expedientes y resoluciones de la Agencia Tributaria (AEAT) a los que tuvo acceso EFE, varios afectados por la situación han visto resueltas sus resoluciones y han recibido el dinero que les correspondía.
El importe de la compensación, que puede llegar a los 4.000 euros, dependerá de la vida laboral del pensionista y del tiempo que cotizó. Todas las solicitudes podrán hacerse en la Agencia Tributaria y, en caso de que los afectados hayan fallecido, los herederos podrán pedirlo siempre que no hayan transcurrido más de 4 años de su muerte.
Para reclamarla, se tendrá que solicitar una rectificación de la autoliquidación del IRPF por los años no prescritos y aportar la documentación adecuada que justifique la reclamación.
