Myriam J, una trabajadora de guardería de Francia, ha sido detenida acusada de haber matado a una bebé de 11 meses. Los hechos, que han conmocionado al país, sucedieron el pasado 22 de junio, en una guardería de Lyon de la cadena People & Baby.
Los bomberos acudieron hasta el lugar tras una llamada de auxilio y al llegar descubrieron a la pequeña Lisa, de casi un año, en estado muy grave. La menor tuvo que ser trasladad de urgencia al hospital, pero allí los sanitarios no pudieron hacer nada por salvarle la vida a la pequeña.
En ese momento la Fiscalía se hizo cargo de la investigación para esclarecer las causas de la muerte de Lisa, y las primeras hipótesis apuntaban a que la niña habría ingerido algún tipo de producto tóxico. Al plantearse esa primera hipótesis, todas las miradas se centraron sobre Myriam, la única trabajadora del centro en el momento en el que la pequeña falleció.
Finalmente la autopsia reveló que Lisa ingirió a sosa cáustica, un tóxico que le provocó graves quemaduras a las que no pudo sobrevivir.
Hasta 30 años de cárcel
Con toda la información, las autoridades detuvieron a Myryam acusándola de homicidio involuntario. En ese momento fue ella misma la que confesó lo ocurrido, aunque solo una parte de ello. La versión no fue creída por las autoridades, ya que aseguró que la niña se había ensuciado la cara y que ella quería limpiársela con ese producto, algo que no creen que fuese así. La fiscalía cree que la mujer obligó a la menor a ingerir el producto, provocándole las quemaduras letales.
Myriam podría ser condenada a 30 años de cárcel por el homicidio doloso a una menor de 15 años, según recoge Le Monde.