La Ministra de Sanidad Carolina Darias ha anunciado ha anunciado que "toda la población" tendrá tarde o temprano acceso a una cuarta dosis contra la Covid-19. Su aplicación no será inminente porque aún hay dudas a solventar. Pero más allá de esa promesa, los datos en torno a esta nueva dosis son escasos.
"Falta decidir cuándo", ha apuntado la ministra. Darias ha expresado que "probablemente una fecha que se pueda barajar como posible sea en torno al otoño".
¿A quiénes se administrará esta dosis?
Desde enero, esta cuarta dosis ya se está administrando a personas inmunodeprimidas. Aunque la Comisión de Salud Pública recomendó la administración de la segunda dosis de refuerzo en la población más vulnerable, es decir, personas internas de residencias y personas mayores de 80 años,finalmente se ha ampliado a la población general.
La estrategia de Sanidad, tal y como relatan fuentes del Ministerio, es empezar a vacunar con la cuarta dosis a los mayores de 80 años y después "ir bajando de grupo de edad a medida que vaya evolucionando la situación". Es decir, como se ha realizado en las anteriores tres rondas de vacunación.
¿Cuánto hay que esperar entre dosis?
No hay fechas para la cuarta dosis, pero otra de las certezas claras es que hay que se recomienda esperar al menos cinco meses para recibir el pinchazo de la tercera dosis si se ha pasado la covid.
En ningún caso el margen de tiempo afecta o se ha decidido por cuestiones de salud de los vacunados. La clave del cambio de criterio es hacer más útil el pinchazo de la dosis de refuerzo.
Los datos de la tercera dosis
Por ahora, la tercera dosis está estancada en España y los datos han dejado de crecer. Los porcentajes han crecido apenas un 0,5% y hay franjas de población que presentan unos datos bajos.
El 87% de la población general (41.244.442 personas) tienen al menos una dosis y el 85,5% (40.527.090 personas) tienen la dosis completa.
No obstante, esta cifra desciende mucho cuando se trata de la dosis de refuerzo. En España, el 53% de la población total (25.190.614 personas) han acudido a ponerse la dosis de refuerzo.
Muchos expertos asumen que la vacuna del coronavirus tendrá un uso similar al de la gripe: cada año se irá reformulando, adaptándose a las nuevas variantes que surjan, y se administrará a las personas más vulnerables a la enfermedad. Pero la de la gripe no es una vacuna que se recomiende a toda la población; solo a aquella que se considera que corre más peligro de enfermar gravemente.
