Un smartphone, vídeos cortos y un flujo de contenido infinito. Estos tres elementos son las principales características de TikTok. Esta red social causa furor entre los jóvenes (y no tan jóvenes), llegando incluso a cambiar los hábitos de consumo de vídeo de sus millones de usuarios. Cualquiera pensaría que parte en desventaja pudiendo albergar solo contenido en dicho formato, a diferencia del resto de plataformas. Sin embargo, el que la usa sabe lo rápido que pasa el tiempo cuando te adentras en su mundo.
Matthew Brennan, experto británico en tecnología china ha asegurado a la BBC que el algoritmo de TikTok es uno de los "más sofisticados del mundo". La clave se encuentra en estudiar los gustos del usuario a través de sus interacciones, mostrando contínuamente contenido que le interesa y dificultando la tarea de soltar el teléfono. "Los ejecutivos y los ingenieros detrás de la app sabían cómo convertir este servicio de vídeos cortos en una de las redes sociales más adictivas del mundo", cuenta Brennan.
"Aprende qué te gusta y qué no te gusta"
Y es que desde su nacimiento en 2016, su trayectoria se ha mantenido ascendente en todo momento, aunque en este último año las descargas se han disparado. "No hay un equipo pequeño detrás. Es una de las mayores compañías de internet en China. Emplea a miles de personas" admite Brennan. "Si TikTok ha crecido tan rápido se debe a la experiencia de sus ingenieros y a que opera el mejor motor de recomendaciones del competitivo mercado chino", amplia el experto.
Según Michael Brennan: "Aprende qué te gusta y qué no te gusta". Además, las corta duración de los vídeos favorece la rápida obtención de datos por parte de su propietaria, la empresa tecnológica china ByteDance. "En 1 minuto puedes ver 5 o 6 vídeos. En ese tiempo, tienes que descartarlo o verlo. Y esa acción revela si te gusta o no. Así que ByteDance puede conseguir mucha información en muy poco tiempo".
"En TikTok, interactúas constantemente con la aplicación e incluso si no lo haces, también estás dando información"
Podemos, por ejemplo, comparar otras plataformas que albergan vídeo como YouTube, donde nos ocupa unos cinco minutos decidir si algo nos gusta o no. También el caso de Netflix, donde este tiempo se amplia a más de media hora. "En TikTok, interactúas constantemente con la aplicación e incluso si no lo haces, también estás dando información. Si no haces nada significa que has parado en un video y lo estás viendo, que te parece interesante", opina Brennan.
Así que no solo se trata de un motor bien hecho, sino que obtiene un infinito suministro de gasolina que nos alimenta sin parar. "Rápidamente elaboran un gráfico de intereses de cada usuario. Es otra de las claves de TikTok: la personalización es extrema. Lo que tú ves es diferente de lo que ve tu amigo. Ese es el poder. Por eso es tan adictiva", añade el experto.
Todo usuario de redes sociales sabe que la mayoría tiene un modelo scrolling, a través del cual navegas por una misma página que desplazas hacia abajo constantemente. Sin embargo, en plataformas que albergan fotos como Instagram, puedes pasar el contenido rápido y sin prestar atención, sin que esto signifique especificamente que te guste o no. En el caso de TikTok hablamos de vídeos cortos, por lo que no te queda otra que quedarte unos segundos en cada uno de ellos para ver de qué se trata y darle información al algoritmo: darle a like o quedarte viéndolo si te gusta; o pasarlo rápido e incluso darle a no me interesa si no te gusta. Este es el momento en el que te estudia y te atrapa. El algoritmo se vuelve uno con tus personalidad e intereses y no te queda otra que pasar horas y horas en la app.
