La cadena de distribución de moda infantil Orchestra ha conseguido salvarse de la quiebra 'in extremis' y mantendrá la marca en activo, al menos, en el corto plazo tras su venta a la compañía Nerw Orch.
Su nueva matriz presentó una oferta de 176,4 millones de euros por la compra que finalmente han sido admitidos por el Tribunal de los Mercantil de Montepellier. Con ello, el grupo saudí Al-Othaim queda al margen, bajo el argumento de que sus planes suponían el final definitivo de la enseña.
La compra supone mantener la marca, pero se aplicarán recortes. El más importante será la reducción de su red comercial: se cerrarán la mitad de los establecimientos en el país y habrá un mayor impulso de la venta online (ahora representa un 10% de facturación).
Con todo, Orchestra quedará en España con una decena de tiendas, priorizando aquellas con una mayor superficie y las que incluyen una oferta de puericultura, según comenta la firma.
Un futuro en riesgo
La situación de Orchestra ha sido crítica durante los últimos años, lo que le ha llevado a cerrar, hasta hoy, una treintena de establecimientos para equilibrar las cuentas de la marca (ahora se suma una nueva oleada de cierres).
A pesar de que se ha salvado de la quiebra 'in extremis', la capacidad de reorientar el negocio y ejecutar los ajustes necesarios se antojan como necesidades imprescindibles. Aún así, la marca cerró 2019 con una ligera progresión en España y espera crear una tendencia que permita consolidar su negocio a medio plazo.
Orchestra fue fundada en 1995 por Pierre Mestre y su esposa Chantal, hasta el punto de terminar como uno de los mayores grupos de distribución de moda infantil en todo el mundo.
Tras una intensa reestructuración, el grupo ha ido desequilibrando sus cuentas hasta el punto de rozar la quiebra en el último ejercicio. Su venta garantiza un salvavidas y ahora depende de sus reformas para llegar a buen puerto.
