Sentirse solo es una de las peores sensaciones que los seres humanos podemos experimentar a lo largo de nuestra vida. Todos necesitamos compartir tiempo de calidad con otra persona, poder contar lo que se nos pasa por la cabeza y lo que sentimos. Todos necesitamos ser escuchados. Además, varios expertos afirman que la soledad, entendida como aislamiento social, puede ser una amenaza mayor para la salud que la obesidad.
Aseguran que sociabilizar puede reducir en un 50% la muerte prematura de quienes se sienten y están completamente solos. Es un problema real que afecta cada vez a más personas de todas las edades y no sólo a las personas mayores, como se suele pensar.
En España, más de cuatro millones y medio de personas se sienten solas de manera habitual, es decir, un 8% de la población. Pero poco se hace para paliar este problema. Desde la sociedad civil el papel del voluntariado es fundamental, ya que acompañan a personas mayores que viven solas, a jóvenes que no están integrados o a personas con diversidad funcional que no pueden salir a la calle, entre otras situaciones.
Mientras en nuestro país los políticos no se han dado cuenta de lo que supone este problema, en Reino Unido han entendido que se trata de un problema de salud pública que incide en la mortalidad de los británicos. Según un informe encargado por La Comisión Jo Cox sobre la Soledad, que lleva el nombre de la política laborista asesinada en 2016 por un neonazi, más de nueve millones de anglosajones -casi un 14%- se sienten solos. Por eso la presidenta, Theresa May, ha decidido crear un ministerio para atajar la soledad, la encargada de las políticas que se lleven a cabo dentro del mismo, será Tracey Crouch.
Más de un mes sin hablar con nadie
El Informe 'Jo Cox' revela que la soledad está asociada a la depresión, ansiedad, enfermedades cardiovasculares y a la demencia y que "puede ser igual de perjudicial para la salud que fumar 15 cigarros al día". También apunta que más de 200.000 personas mayores en Reino Unido no suelen hablar con nadie en más de un mes. Para May la solución no pasa sólo por el Gobierno, sino que los empresarios y la sociedad civil en su conjunto deben saber del problema y actuar en consecuencia.
El Gobierno británico estudiará las estadísticas y financiará a quienes trabajen ayudando a las personas que se sienten solas. Por tanto, en los presupuestos del Estado una partida irá destinada a las organizaciones que se dediquen a acompañar a personas que vivan en estas circustancias. "Estoy segura de que, con la ayuda de voluntarios, activistas, empresas y mis compañeros del parlamento, podremos alcanzar un progreso suficiente en el combate de la soledad", aseguró Crouch.
Para la comisión encargada de elaborar el informe, la "epidemia de soledad" tiene que ver con la desaparición y el debilitamiento de ciertas instituciones que a lo largo de la historia servían para que la gente se encontrase e intercambiase opiniones.
Ponen de ejemplo a los sindicatos, los pubs, la iglesia o las cajas en los supermercados, atendidas por personas que servían para charlar con quien te atendiese, ahora están siendo sustituidas por cajas de autoservicio. Aunque no sirve como excusa, ya que existen otros lugares de encuentro. El problema es que nos hemos vuelto muy egoístas y preferimos mantener una conversación a través de Whatsapp a tenerla de tú a tú o incluso nos da pereza llamar y preguntar qué tal está alguien.
