La crisis sanitaria del coronavirus está poniendo a prueba tanto al Gobierno como a la oposición. Teniendo en cuenta la envergadura de la situación, cabría pensar que todos los partidos se unieran para dar una respuesta común alejándose de los ataques típicos de cualquier día de la legislatura. Sin embargo, algunas formaciones están aprovechando para intentar hacer tambalear al Gobierno con ataques, ruidos y pocas propuestas.
Es el caso de PP y VOX, cuyo papel en la crisis del COVID-19 incluso ha saltado a la prensa extranjera. El diario británico The Guardian ha criticado a los partidos de la oposición en España, que, según afirma, utiliza la crisis sanitaria por el coronavirus como un garrote contra el Gobierno de Pedro Sánchez.
En su análisis sobre la situación del estado de alarma en España, The Guardian destaca que, mientras en otros países europeos la clase política busca consenso para superar la crisis, en nuestro país la oposición apovecha para cargar contra la gestión del Ejecutivo.
Publicado el pasado martes 5 de mayo, The Guardian analizó que el presidente del Gobierno tenía difícil conseguir una nueva prórroga del estado de alarma que se decretó por primera vez el 14 de marzo debido a la postura intolerante de los principales partidos de la oposición.
Casado, Abascal y ERC
Según ha recordado la publicación, "el líder del conservador Partido Popular (PP)" anunció que se sentía incapaz de apoyar otra extensión de dos semanas la situación de emergencia. Según apunta The Guardian, Pablo Casado consideró que las medidas, inicialmente diseñadas para contener la enfermedad y prevenir el colapso de las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI) del país, ya no eran necesarias en un momento en que a las personas se les permitía de nuevo salir al aire libre.
"Santiago Abascal, líder del partido de extrema derecha VOX, también se niega a apoyar una extensión y ha comparado a Sánchez con un cirujano que mata a personas sanas en su mesa de operaciones", denuncia The Guardian sobre el líder del partido ultra.
Pero no solo ha dedicado unas líneas a Casado y Abascal. También ha cuestionado el papael de Esquerra Republicana de Catalunya subrayando su oposición a la prórroga del estado de alarma. "Mientras tanto, algunos políticos catalanes separatistas han sugerido que habría habido menos muertes de COVID-19 en una Cataluña independiente", apunta el artículo.
"Es posible que Pedro Sánchez y su gabinete estén mirando con envidia a través de la frontera con Portugal, donde otro gobierno minoritario socialista reconoce que el apoyo de los partidos de la oposición le ha ayudado a luchar contra COVID-19", concluye.
