La quinta sesión del juicio contra Ana Julia Quezada ya ha tenido lugar y los peritos han relatado el terrible estado en el que encontraron al pequeño Gabriel Cruz en el maletero de la acusada.
"Tendido en el suelo del maletero, envuelto en una toalla y la cara llena de barro". Con estas palabras ha descrito la escena el agente encargado de declarar, que añade además que la sangre de Gabriel fue hallada no solo en el maletero, en el faro y en un asiento; sino que también estaba presente en la ropa del pequeño que Ana Julia tiró a un contenedor, en la tumba que excavó, en el jardín y en el interior de la casa. También se encontró ADN de Gabriel en la cabeza del hacha.
Por su parte, la acusación particular ha reforzado la idea de que Quezada no habría solo asfixiado al niño, sino que habría cometido un delito de asesinato con ensañamiento. Esta teoría la ha reforzado también el testimonio de los guardias civiles que analizaron el móvil de la autora confesa, que afirman que Ana Julia estuvo más de tres horas en la finca, por lo que habría tenido tiempo de limpiar la casa después de enterrarlo y pintar para fabricar una coartada.
Sin embargo, la defensa asegura que no existen pruebas de que la acusada limpiara el lugar del crimen, porque el análisis de los restos encontrados en la fregona y en el cubo dieron negativo.
La quinta sesión del juicio de Ana Julia
La quinta sesión de la vista con jurado popular contra la acusada por el asesinato del menor Gabriel Cruz ha empezado a las 09:58 de el viernes 13 de septiembre, y en ella se ha podido ver a Ana Julia Quezada sin las esposas y con la mirada perdida. La presunta asesina se ha mostrado bloqueada, desconectada tras cinco días de testimonios incriminatorios de testigos, agentes y peritos.
No ha hablado con su abogada, Beatriz Gámez, y tampoco ha hecho, como es ya habitual, gestos de desaprobación a las palabras de los guardas civiles que han puesto en duda el testimonio de su defensa.
El juicio se retomará el próximo lunes 16 de septimebre con la declaración de los médicos del Instituto de Medicina legal de Almería (IME), y los doctores contratados por la acusación particular para ofrecer una segunda versión de la autopsia.
Se espera que el próximo martes 17 de septiembre, el juzgado popular, conformado por siete mujeres y dos hombres, se retire con todas las pruebas para determinar el veredicto.