Medios estadounidenses como Wall Street Journal o CNN han expresado temor a que otras decisiones tomadas hace años por el Tribunal Supremo como la legalidad del matrimonio igualitario o el derecho a usar métodos anticonceptivos sean revocadas por la Corte, tal y como ocurrió con el derecho al aborto.
El principal argumento usado el viernes por la mayoría conservadora del Supremo para revocar la sentencia de 1973 bautizada como 'Roe v. Wade' que protegía legalmente el aborto fue que éste no está recogido explícitamente en la Constitución de EE.UU -que data de 1787-, y que la Corte de 1973 se había excedido en su interpretación de la Carta Magna.
En el fallo de la sentencia del aborto, el magistrado del Supremo, Clarence Thomas, uno de los jueces más conservadores, emitió una opinión propia en la que animó directamente a sus compañeros a revisar otras sentencias emitidas en el pasado usando el mismo prisma que en la decisión sobre el aborto.
"Tenemos el deber de corregir el error establecido en precedentes como Griswold, Lawrence y Obergefell", escribió Thomas en su opinión.
No hay ley federal que proteja ciertos derechos
El matrimonio igualitario y el derecho a usar anticonceptivos, igual que el aborto hasta ahora, no están protegidos por ninguna ley a nivel federal. Es por ello que ahora existe el temor a que suceda una situación similar a la ocurrida con el aborto.
Los precedentes que Thomas mencionó en su opinión, los de Griswold, Lawrence y Obergefell; son los que protegen, respectivamente, el derecho a obtener métodos anticonceptivos (1965); el derecho a tener relaciones sexuales privadas (2003) y el derecho al matrimonio igualitario (2015).
Las palabras de Thomas tienen especial relevancia porque son una señal clara para que los grupos conservadores que luchan contra este tipo de cuestiones en los tribunales lleven su batalla legal al Supremo, sabedores ahora de que allí tienen por lo menos un aliado, y quizá el apoyo de la mayoría.