Katy Perry está atravesando un buen momento profesional, pero parece que las cosas también le van por buen camino en lo personal, pues la cantante estadounidense parece haber escondido las uñas tras un enfrentamiento con Taylor Swift, que duró algo más de 5 años.
Además de la vuelta de Perry a su pop más fiel y encandilar a sus fans con su nuevo look, la cantante ha dado el paso y ha tranquilizado a sus fans, cerrando uno de las grandes dramas de la música.
El enfrentamiento con Taylor Swift se remonta al año 2012 cuando la intérprete de 'Bad Blood' contrató para su espectáculo a tres de los bailarines que formaban parte del equipo de Perry, a la que no le sentó nada bien. En 2014, durante la aparición de la intérprete de 'I Kissed A Girl' en el programa 'Carpool Karaoke', esta confirmo que habría intentado hablar lo ocurrido con Swift, pero esta no habría querido.
A lo largo de los años, numeros comentarios han estado siempre presentes en redes sociales por parte del fandom de ambas cantantes, en muchas ocasiones enfrentados, los cuales solían alegrarse de las desaveniencias en su imagen pública y sus carreras, siendo ellas mismas partícipes de esa coyuntura.
Watch out for the Regina George in sheep's clothing...
— KATY PERRY (@katyperry) 9 de septiembre de 2014
Se rumorea que ambas cantantes escribieron y lanzaron al mercado temas que iban en contra de la otra. En el caso de Taylor Swift, confirmó a Rolling Stone que 'Bad Blood' se lo dedicaba a una artista que había intentado sabotearla y contratar a un grupo de bailarines de su espectáculo sin avisarle. Los fans y seguidores de la industria musical rápidamente apuntaron a Perry, pero Swift nunca confirmió ni desmintió que se tratase de ella. Katy Perry hizo algo similar hablando del karma en su hit 'Swish Swish', ya que la industria musical asumió que era su respuesta hacia las intenciones de la de Pennsylvania, además de la publicación donde le dedicaba a Taylor Swift las siguientes palabras: "Regina George con piel de cordero".
Con un silencio sepulcral por parte de ambas artistas y sus círculos más cercanos desde hace algún tiempo, Katy Perry sorprendió a todo el mundo la noche del 11 de junio cuando subió a su cuenta de Instagram una foto en la que se podía leer 'Peace at last' ('Paz al fin') en un plato repleto de 'cookies' americanas, donde Taylor Swift aparecía etiquetada en la descripción. Swift respondió con unos cuantos corazones, por lo que se asume que ambas cantantes han firmado la paz entre ellas.
Cada detalle de una publicación en redes sociales es digno de un análisis exhaustivo, por lo que ahora a la pregunta de la prensa y los fans de las cantantes es a qué hace referencia lo que Perry eligió para definir su geolocalización, 'Let's be friends'. ¿Será el título de una nueva colaboración juntas o simplemente una manera de dejar claro que vuelven a ser amigas y se han dado una tregua?
La prensa, fabricante de historias ¿reales?
No es de extrañar que muchas de las historias que se leen a diario entre artistas y celebrities sean inventadas por los medios de comunicación o comunidades de fans, siendo plenamente ajenas a los pensamientos de los artistas y lo que de verdad sienten.
Son muchos los casos en los que se ha descubierto que esto era así, como sucedio a principios de la década de los 2000 con dos de las artistas más populares en aquel momento, Christina Aguilera y Britney Spears. Ambas coincidieron en 'The Mickey Mouse Club' y fueron invitadas por Madonna a actuar juntas. Tras la actuación, lo único que se comentó fue el beso a Britney Spears, pero todo el mundo era consciente de la ya existente 'supuesta' rivalidad entre ambas que la prensa estaba empeñada en mantener, comparando sus estilos, voces y pasos en la industria musical. Las dos artistas dijeron no entender esa supuesta rivalidad, no existente, en repetidas ocasiones.
Otros conflictos muy sonados en los últimos años son los de Ed Sheeran y Lady Gaga; Miley Cyrus y Nicki Minaj; Iggy Azalea y Britney Spears o Adele y Bruno Mars.