Los talibanes entraron en Kabul, capital de Afganistán,en agosto de 2021, y tomaron el control del país. Desde entonces solo se han sucedido noticias de violaciones de derechos humanos, derechos de las mujeres, violaciones, encarcelaciones, ejecuciones, etc. Las malas noticias relacionadas con el país del Medio Oriente solo hacen que sucederse.
La última de las acciones que el grupo islamista ha emprendido desde el mando del gobierno afgano se llevó a cabo el pasado 20 de diciembre, cuando el Ministerio de Educación prohibió a todas las mujeres acudir a la universidad. Es por este hecho que aquellas que posean una carrera universitaria no podrán acceder a un título que acredite este mérito.
La ONU ha condenado estos hechos y ha solicitado a las autoridades del país que se "revoque inmediatamente la decisión". En un comunicado emitido por la Misión de Asistencia de la ONU (UNAMA) se insta al país afgano a "reabrir las escuelas para niñas más allá del sexto grado y poner fin a todas las medidas que impiden a las mujeres participar plenamente en la vida pública cotidiana".
Volker Türk, el Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos ha descrito la prohibición como un "golpe atroz y cruel a los derechos de las mujeres y niñas afganas" así como un "revés profundamente lamentable para todo el país". Afirmó que suspender el acceso de las mujeres a la educación universitaria supone una clara violación de las obligaciones básicas de Afganistán en relación con el derecho internacional.
Desde que entraran en verano del año pasado y tomaran el control del país, las mujeres han tenido vetado el acceso a la educación secundaria, a su libre circulación y se les ha prohibido la entrada a parques, gimnasios y baños públicos, siendo la más grave de todas su reciente confinamiento en sus hogares.
Roya y Helai
Dos universitarias afganas de 22 años, Roya y Helai, cuentan como tuvieron que abandonar su país el pasado sábado sin poder recoger su título universitario que acreditaría que han estado estudiando los últimos 4 años la carrera de Filología Hispánica. Sería el miércoles pasado, un día después de que se impusieran las prohibiciones, cuando intentarían acceder a su campus universitario a recoger su título, pero los talibanes les prohibieron la entrada. "Ahora no podremos demostrar
que somos licenciadas en Hispánicas. Esto nos rompe el
corazón", comenta Helai.
Las dos jóvenes ahora refugiadas en Pakistán cuentan que, cuando intentaron acceder al campus universitario a recoger su título, los talibanes estaban "por todas partes" rodeando por completo el recinto. "Nos dijeron que, a partir de ese día, las mujeres no estábamos autorizadas a estudiar y ni siquiera a entrar en el campus. Luego nos pegaron a todas para que nos fuéramos de allí", recuerda Helai.
Según comenta Parwin, una refugiada afgana en España de 21 años de edad, el plan de los afganos es vetar la entrada de las mujeres a un trabajo. "Los talibanes quieren quemar los títulos de las mujeres, para que nunca puedan acceder [a un trabajo]", finaliza.