Hong Kong está sumida en el caos y China ya está encargándose de deslegitimar las protestas que han enfrentado a pro y antigubernamentales, clasificando a los protestantes como 'separatistas radicales'. Un momento crítico que se ve también afectado por las variadas opiniones de la gente que se difunden a través de canales como Twitter, Youtube o Facebook.
Ha habido un borrado inmenso de cuentas cuyo objetivo es desestimar estas protestas, pero China sigue buscando estrategias y se ha decidido por utilizar un nuevo medio: una de las páginas porno más populares, Pornhub.
El peligro de la desinformación
Las redes sociales hacen que el periodismo ciudadano sea cada vez más viable, ya que cualquiera con un móvil en la mano puede publicar información, sea cierta o no. Youtube, por su parte, cerró alrededor de 210 canales que difundían información confusa y revuelta contra los manifestantes desde julio. Aunque eso no ha sido ningún impedimento, ya que algunos de los más populares comentaristas chinos se han mudado a Pornhub para seguir compartiendo allí sus vídeos, como Shu Chang, "YouTube no nos permitiría subir esos videos, así que no tenemos otra manera que publicar los videos en PornHub", afirmó en su cuenta de Weibo.
A pesar de que no ha dado cifras acerca de los vídeos que se han publicado, al menos encontramos una docena. Eso sí, están enterrados y camuflados entre vídeos porno, pero pueden encontrarse. Los títulos son variados, como "HONG KONG DEMOCRATIC PROTESTERS MADE OLD MAN FEEL HOT", lo que signficia "los manifestantes democráticos de Hong-Kong pusieron cachondo a un viejo". Con estos títulos se pretende despistar a la plataforma y evitar que también les elimine los vídeos.
Las protestas
Las protestas en Hong Kong se han producido para exigir la retirada del proyecto de extradición a China, presentado por el gobierno de Carrie Lam, que tras conseguir su objetivo continuó demandando democracia. La oposición de la población se debe al temor de que el proyecto abra las puertas a las leyes de la República Popular de China y los habitantes sean sometidos entonces a un sistema legal diferente.
Los manifestantes exigen más democracia y una investigación sobre la presunta brutalidad policial durante las manifestaciones, en las que ha habido ya al menos dos fallecidos. El origen del problema se remonta a que aunque Hong Kong pertenece a China, tiene su propia moneda, sistema político e identidad cultural. Asimismo, algunos de los habitantes de Hong Kong no se reconocen a sí mismos como chinos, sino como hongkoneses.
La Ley Básica de Hong Kong es la encargada de garantizar libertades que no están disponibles en el territorio continental chino, como el derecho a protestar, el derecho a una prensa libre y la libertad de expresión. Sin embargo, durante los últimos años Beijing la ha reinterpretado y ahora mantienen que China tiene jurisdicción completa sobre Hong Kong. Las protestas llevan dándose durante meses, aunque a lo largo de esta semana se han radicalizado.