El universo de Hollywood vive una de las semanas más duras y es que una de sus parejas de éxito han dado el paso y han decidido divorciarse, confirmando los rumores que se habían divorciado hace unos meses cuando vieron al galardonado actor tapándose el tatuaje que tenía en el hombro con la cara de la que es su mujer. Sylvester Stallone y Jennifer Flavin han puesto punto y final a su relación sentimental tras más de 25 años casados y con tres hijas en común.
La pareja, que se conocieron en 1977 han permanecido manteniendo la relación desde entonces. En ese momento, ella tenía 19 año cuando viajó a Hollywood para visitar a una amiga, viendo a Stallone en un conocido restaurante. Fue diez años más tarde cuando comenzaron su relación, teniendo una crisis en 1994, recuperando la relación varios meses más tarde y en 1996 tuvieron su primera hija. Para celebrar esta situación, la pareja decidieron casarse, manteniendo la relación hasta la fecha.
Quien ha dado el paso ha sido la exmodelo, que reconocía a People que tomó esta decisión tras más de 30 años de relación sentimental con quien espera mantener una buena relación: "Me entristece anunciar que después de 25 años de matrimonio me divorcié de mi esposo Sylvester Stallone. Ya no estaremos casados, pero siempre apreciaré la relación de más de 30 años que compartimos. Ahora estamos comprometidos con nuestras hermosas hijas. Pido privacidad para nuestra familia a medida que seguimos adelante amistosamente".
Flavin presentó hace unas semanas los papeles necesarios para presentar la demanda de divorcio en el condado de Palm Beach, que está en Florida. Ambas partes han decidido llevar esta situación de la mejor manera posible, afrontando las peticiones de la empresaria que solicita recuperar su apellido de soltera y contar con el uso exclusivo del hogar conyugal.
No ha sido por un perro
Se ha comentado en varias ocasiones que la relación ha llegado a su final por el rottweiler que ha llegado a la familia, llegando a tener varias discusiones sobre los cuidados del perro. Estos rumores cogieron fuerza cuando el actor italiano americano fue visto tapándose el tatuaje que tenia de Jennifer Flavin con la cara de su mascota. Al parecer, según han informado personas del entorno del actor, se debía a que el tatuaje de su expareja se encontraba deteriorado, y al no poder recuperarlo decidió tatuarse la cara del perro.
En la demanda de divorcio que ha tenido acceso varios medios americanos, la empresaria apuntaba que el actor: "se ha dedicado a dilapidar, agotar y/o malgastar intencionadamente los bienes del matrimonio, lo que ha tenido un impacto económico adverso en el patrimonio conyugal", por lo que la mala gestión económica del protagonista de Rocky ha hecho que la pareja haya decidido tomar caminos separados.
La veterana y consolidada pareja ha puesto punto y final a una relación donde los caminos laborales y profesionales han impedido que pudieran pasar tiempo juntos, por lo que junto a la mala gestión del acto ha hecho que Jennifer Flavin moviese ficha y decidiese poner punto y final a su relación sentimental.