El Gobierno subirá las pensiones contributivas en 2023, con una referencia del 8,46%. Con ello, se está adoptando como guía el dato de inflación adelantada de noviembre publicado este martes. Con ello, se busca que los pensionistas no pierdan poder adquisitivo durante el próximo año.
La pensión media de jubilación pasaría de los 1.258,84 euros a 1.365 euros; la pensión media de incapacidad permanente de 1.034,62 euros a 1.122 euros; la de viudedad de 781,16 euros a 847 euros; en favor de familiares de 641,19 euros a 695 euros y la de orfandad de 439 euros a 476 euros. Siempre en términos mensuales y en base a los datos más actualizados, a inicios de mes.
En cuanto a la pensión máxima, también se registrará un incremento. La web de la Seguridad Social indica que actualmente se sitúa en 2.819,18 euros mensuales, por lo que pasará a los 3.058 euros.
Por su parte, las pensiones no contributivas de jubilación e invalidez mantienen el 15% de aumento excepcional realizado a mitad de este año 2022 por la subida generalizada de precios que se experimento por la inflación derivada de la invasión de Ucrania.
En el resto de los supuestos, se incrementarán las pensiones mínimas con la inflación actual, cuyo dato definitivo no se conocerá hasta el próximo 14 de diciembre.
Incrementos
De esta forma, se espera que las pensiones contributivas de jubilación aumenten en el próximo año. Las personas mayores de 65 años reciben una pensión mínima de 890,50 euros mensuales si tienen un cónyuge a cargo, por lo que ascenderá a 966 euros. Sin cónyuge a cargo la mínima pasa de 721,70 euros a 783 euros, mientras que si es con cónyuge no a cargo, salta de 685 euros a 743 euros.
En casos de jubilaciones con menos de 65 años, la mínima con cónyuge a cargo pasa de 834,90 euros a 905,5 euros, sin cónyuge de 675,20 euros a 732 euros y con cónyuge no a cargo pasará de 638,20 euros a 692 euros
En cuanto a la pensión de viudedad, la mínima pasará de 834,90 euros a 905,5 euros cuando se tengan cargas familiares, de 675,20 euros a 732 euros cuando se tenga entre 60 y 64 años y de 546,80 a 593 euros cuando se sea menor de 60 años. Si se tienen 65 años y discapacidad igual o superior al 65% se pasa de 721,70 euros mensuales a 783 euros.
Si hablamos de una pensión por incapacidad permanente, dependerá del grado. En las mínimas por gran invalidez se pasará de 1.335,80 euros con cónyuge a cargo a 1.449 euros, sin cónyuge se pasa de 1.082,60 euros a 1.174 euros y con cónyuge no a cargo de 1.027,50 euros a 1.114 euros.
En incapacidad permanente absoluta o total con 65 años se pasa de 890,50 euros a 966 euros, de 721,70 euros a 783 euros y de 685 euros a 743 euros, respectivamente. Para las totales entre 60 y 64 años pasan de 834,90 euros, 675,20 euros y 638,20 euros a 905,5 euros 732 euros y 692 euros.
Por incapacidad total derivada de enfermedad común en menores de 60 años se pasará de 532 euros y 527,40 euros a 577 euros y 572 euros en función de la situación.
En los casos de orfandad, también se contemplan incrementos, de 220,70 euros en el mínimo a 239 euros y en caso de beneficiarios menor de 18 años o con discapacidad igual o superior al 65%, de 434 euros a 471 euros.
En casos de orfandad absoluta, un beneficiario verá incrementada la mínima de 733,30 euros a 795 euros, mientras que en las prestaciones pasará de 675,50 euros a 733 euros para un beneficiario y de 1.138,70 euros a 1.235 euros con varios beneficiarios.
En cuanto a la pensión en favor de familiares, la cuantía mensual pasará de 220,70 euros a 239 euros. Si no existe viuda ni huérfano pensionistas, un solo beneficiario con 65 años pasará de una mínima de 533,10 euros a 578 euros, mientras que si es menor pasará de 502,40 euros a 545 euros.
