Jesús Candel, más conocido en redes sociales como Spiriman, ha anunciado que padece cáncer: "El pasado 4 de agosto decidí, por caprichos del destino, luchar contra el cáncer. Uno además muy agresivo y extendido por distintas partes de mi cuerpo. ¿Cómo me iba a poner el destino un reto fácil?", ha revelado en un escrito publicado en su perfil de Facebook.
Las alarmas sobre su estado de salud habían saltado durante los últimos días tras una publicación donde anunciaba su retirada de Youtube, aunque Spiriman no había hablado sobre ello hasta ahora: "Desde el refugio de mi hogar y rodeado del calor de mi familia os escribo estas palabras de agradecimiento a tantísimos que os habéis preocupado por mi estado de salud en estos últimos dias".
Candel ha aprovechado este anuncio para reivindicar la prevención individual como la mejor herramienta en la lucha contra el cáncer: "El 70% de las muertes que se producen por esta enfermedad en el mundo se podrían evitar. ¿Cómo? Por la prevención. Se destinan miles y miles de millones de euros necesarios para la investigación de muchas enfermedades, pero se invierte muy poco en prevenirlas".
Spiriman considera que nuestra sociedad no está actuando adecuadamente a la hora de luchar contra la enfermedad: "Un círculo vicioso en el que nos hemos metido y que nos lleva a abusar de lo que nos daña y una sociedad que nos ha llevado a delegar nuestra responsabilidad en auténticos mamarrachos irresponsables que sólo se preocupan por el cortoplacismo".
"Aunque no todo depende de nosotros, lo importante y por lo que merece la pena vivir, sí"
Jesús Candel señala que esta circunstancia ha provocado que su"lucha haya cambiado de objetivo en estos difíciles momentos" y añade: "El destino ha sido caprichoso conmigo, pero lo hemos decidido los dos. Todo lo que nos rodea influye para que enfermemos o no. Yo he tenido unos años en los que he jugado fuerte con mi cuerpo y mi mente, y lo ha notado".
Spiriman se muestra fuerte en esta lucha y se muestra convencido de ganar: "Sigo aquí, luchando ahora por mi vida y pensando mucho en todos aquellos, que como yo, sufren esta terrible enfermedad. Una oportunidad para demostrarnos a nosotros mismos que los milagros existen, porque los milagros se hacen realidad cuando se pelea y se cree en ellos". Y añade una importante reflexión: "Y aunque no todo depende de nosotros, lo importante y por lo que merece la pena vivir sí".
