¿Cansado de adorar a Dios o a Buda? Una nueva divinidad ha surgido con fuerza los últimos años dispuesto a 'hechizar' a sus adeptos: Severus Snape. El Maestro de Pociones y profesor de Defensa contra las Artes Oscuras podrá no haber conquistado a Lily Evans, madre de Harry Potter, pero tiene una legión de seguidoras dispuestas a hacer lo que sea por él.
Son las snapewives del snapeísmo, la religión que han creado para tratar como es debido al que consideran su dios. Y ojo, porque el movimiento es más fuerte de lo que uno podría llegar a pensar en un principio. De hecho, el término 'snapewives' ha logrado hacerse un hueco en el conocido Urban Dictionary. Así lo define la web:
"Un grupo de mujeres de mediana edad que creen estar casadas con Severus Snape en el plano astral. Tienen encuentros en la vida real con Snape, donde se turnan canalizar el espíritu de Snape y celebrar ceremonias de boda con él".
Una religión que cuenta con dos ramas diferentes
A pesar de lo que pueda parecer, el snapeísmo es totalmente real. Para profundizar más en este tema, existe un interesante artículo al respecto escrito por Zoe Alderton en el que trata con Conchita, Rose y Tonya, tres snapewives que comparten la adoración por el profesor de Hoghwarts.
Para Rose, Severus es "la razón, mi razón, mi cordura, mi crecimiento, mi guía, mi amor, mi enfoque, mi ayuda, mi Señor, mi Maestro, mi todo y mucho más". Tonya va más allá, si eso es todavía posible, al afirmar con rotundidad que moriría "sin vacilar" por él. Y es que, como ella mismo admite, ama al Maestro "más de lo que he amado a nadie".
Conchita, la tercera en discordia, explica ante Zoe Alderton que el profesor "me visita, habla conmigo, me aconseja, me ayuda a crecer y a entender". Pertenece por tanto a una rama del snapeísmo que considera al que fuera director de Hoghwarts como un guía espiritual, en contraprestación de aquellas que lo catalogan de "maestro dominante" que necesita ser dominado, muchas veces mediante el sexo.
Aunque existe el riesgo de que se produzca una escisión que lo dinamite todo, similar al Cisma de Oriente y Occidente del cristianismo, de momento todas las snapewives han sabido dejar sus diferencias de lado y remar en una única dirección, la de la devoción por Severus Snape.