El sexting es algo que pone en peligro la vulnerabilidad en la red de los más ingenuos, sin embargo hay quienes ponen la barreras necesarias para proteger su intimidad. En este caso, Slutbot no aparece para ayudarte a encontrar a quien satisfaga tus necesidades sexuales y exponerte ante desconocidos, sino que te ayuda a saber empatizar y llevar hacia adelante tus relaciones más morbosas, esas que se elevan de tono, con un robot que nunca sabrá tu identidad real.
Hay quienes ponen en entredicho su credibilidad y es que estos asistentes virtuales podrían ser el futuro de la comunicación humana, pero otros no quieren sufrir las consecuencias de confiar en ellos y advierten de su dudosa eficacia. En el caso de Juicebox, la empresa ha creado este servicio de texto instantáneo en el que un robot enseña a los mayores de 18 años a que se les dé mejor practicar sexting, es decir, el envío de contenido es erótico, sexual o pornográfico.
Según reza su página web, "Slutbox es un entrenador virtual gratuito que te muestra cómo mantener una conversación subida de tono a través de mensajes o chats". La idea ha sido desarrollada a partir de educadores sexuales y escritores especializados en el género erótico, además sus desarrolladores aseguran su fiabilidad y tu privacidad, pues no nos extrañaría nada que pudieran vender nuestros datos a terceros, algo de lo que se han querido desmarcar antes de cualquier polémica.
Con límites añadidos
Slutbot te enseña a tener sexting con alguien a través de descriptivos ejemplos textuales que te puedan servir de inspiración a la hora de emplearlos en la vida real, sea cual sea el ritmo de la conversación. Juicebox parece recomendar el estilo "Slow & Gentle" si acabas de empezar a usar la app, aunque la cosa puede subir a otro nivel si te decides por la opción "Hot & Sexy". El modo que elijas determinará el tono de la conversación con el bot y te enseñará diferentes respuestas en base al nivel elegido, ya sea con emojis o nombrar específicamente términos relacionados con la sexualidad.
Esta no es la única manera en la que esta empresa fomenta el aprendizaje sexual a través de sus proyectos, ya que ofrecen la opción de que especialistas de su confianza te envíen consejos sobre sexo. Del mismo modo, aseguran que quieren ayudar a todos aquellos que se inicien en el ejercicio de esta práctica, pues no nacemos con un conocimiento base sobre sexting y probablemente los nervios nos coman en el caso de tener una hipotética conversación de este calibre. Juicebox lo ofrece como una herramienta de entrenamiento previo, al menos así lo describe la CEO de Juicebox, Brianna Rader.
La aplicación no tiene coste alguno y por otro lado, y aunque parezca contradictorio e imposible, fomenta el no uso de ciertos vocablos. Si escribimos las palabras "puta" o "perra", la aplicación solo te responderá con un simple y directo "no", dándonos a entender que no apoyan el uso de estas expresiones. Algo que los expertos ponen en duda acerca de los bots es el contexto y si hay algo que Slutbot no permite, es acordar cuáles son los términos que podemos usar con la app, a diferencia de lo que sí ocurriría en la vida real.
Sin embargo, Juicebox persigue la mutua aprobación de cada acto o palabra que se diga en la conversación, por eso se preocupará de si hay algo que al usuario le haya podido sentar mal, preguntándonos si nos ha gustado. Esto contribuye positivamente a erradicar el estigma en contra de la comunicación verbal en las relaciones sexuales.