Nacho Vidal ha anuncuado su retirada del cine para adultos. La estrella del porno, de 45 años, ha comuniado la noticia a través de su canal de YouTube, dejando claro que abandona tanto en su faceta como actor como de productor. El motivo no es otro que la enfermedad que padece y es que el catalán sufre el síndrome de Reiter, una dolorosa y rara afección por la que está pasando un auténtico calvario.
Según describe la Federación Española de Enfermedades Raras (FEDER), el síndrime de Reiter es un trastorno autoinmune perteneciente al grupo de las espondiloartropatías seronegativas y caracterizado por la triada clásica compuesta de artritis, uretritis y conjuntivitis. Tiene una prevalencia estimada de 1/30.000 y es es más común en hombres.
"Su primera manifestación suelen ser síntomas urinarios (poliuria y disuria). La artritis, manifestada con dolor, tumefacción e inflamación, aparece generalmente varias semanas o meses después de los primeros síntomas. Afecta a una articulación (rodilla) o a varias articulaciones principales (rodillas, tobillos o dedos del pie). Los problemas oculares incluyen conjuntivitis con eritema, sensación de quemazón, lagrimeo y fotofobia. Otros síntomas adicionales pueden ser erupciones cutáneas escamosas en pies o manos, alteraciones de las uñas, diarrea, balanitis, fiebre, pérdida de peso, y úlceras de la boca. En la mayoría de pacientes, los síntomas duran de uno a seis meses", explica FEDER.
El sufrimiento de Nacho Vidal
Ha sido el propio Nacho Vidal el que ha explicado a través de un vídeo cómo está lidiando con la enfermedad. "Es una enfermedad que yo contraje sin darme cuenta, hace mucho tiempo, a lo largo de toda la historia del porno, cogiendo gonorreas y clamidias, que he sufrido unas 50 veces en cada caso", ha revelado. De esta manera también ha zanjado los malintencionados rumores que apuntaban a que el actor tenía VIH.
"En su momento tuve fiebre alta, prostatitis y una hinchazón en la mano. Estuve encerrado en mi casa cuatro meses y dos semanas sin dormir porque los dolores fueron a más por todo el cuerpo. De hecho estuve tomando opiáceos y tuve que inyectarme morfina. Visité a seis médicos diferentes sin que fueran capaces de darme un diagnóstico claro hasta que uno logró identificar lo que me sucedía. Sufrí muchísimo e incluso estoy en trámites de pedir la minusvalía porque no puedo trabajar. Me siguen dando brotes y continúo con la medicación. Afortunadamente poco a poco he ido saliendo del bache y ahora me encuentro en un momento en el que me quiero reinventar. Me tengo que reinventar. He decidido dejar atrás la industria del porno", concluye Nacho Vidal.