Los últimos post de Instagram de Céline Dion han devastado a sus fans. La cantante ha comunicado que se ve obligada a cancelar su próxima gira en Europa para el próximo 2023 debido a graves problemas de salud.
La oscarizada cantante por el icónico 'My Heart Will Go On' de 'Titanic' ha anunciado que sufre una enfermedad muy poco conocida. Se trata del síndrome de la persona rígida, una patología neurológica que, según explican desde el National Center for Advancing Translational Sciences, afecta al sistema nervioso central y que se caracteriza por "episodios de rigidez y espasmos musculares de los músculos del tronco y de los brazos y piernas".
Así, la artista ha detallado lo mal que lo pasa con los espasmos: "Afectan todos los aspectos de mi vida, a veces me dificultan hasta el caminar y tampoco me permiten usar las cuerdas vocales como lo hacía antes".
Los síntomas
Este trastorno puede ocasionar consecuencias como posturas anormales, rigidez muscular, espasmos por una sensibilidad aumentada al ruido o al tacto, caídas, parálisis cerebral o epilepsia.
Igualmente, esta patología hace que la calidad de vida de aquellos que la sufren disminuya, lo que puede derivar en trastornos de salud mental como ansiedad o depresión. Además, esto se ve el doblemente agravado ya que la causa del síndrome se relaciona con niveles bajos de neurotransmisores, que son los que ayudan a mantener el estado de ánimo.
Las causas
Estadísticamente, se ha comprobado que la mayoría de los pacientes que padecen el síndrome de la persona rígida tienen anticuerpos contra el ácido glutámico decarboxilasa (GAD), que es la enzima implicada en la producción del neurotransmisor inhibidor GABA (ácido gamma-aminobutírico), detallan en MSD Manuals.
Además, al tratarse de una enfermedad autoinmune, es frecuente que se asocie con otras como la diabetes, la tiroiditis, el vitíligo y la anemia perniciosa.
Los tres tipos
Desde MSD Manuals explican que el síndrome puede ser de tres tipos: autoinmunitario, paraneoplásico o ideopático.
"El tipo autoinmunitario ocurre a menudo con la diabetes tipo 1, así como otros trastornos autoinmunes", informan. Asimismo, comentan que solo el 2% tienen el tipo paraneoplásico. Este está relacionado con el cáncer de mama, aunque también puede desarrollarse en "pacientes que sufran cáncer de pulmón, riñón, tiroides o colon o linfoma de Hodgkin", indican.
No hay cura
El único remedio que se contempla para esta enfermedad es aliviar los síntomas de cada paciente con benzodiazepinas, diazepam o baclofeno que permitan reducir la rigidez y los espasmos musculares.
Asimismo, la inmunoglobulina intravenosa (IVIG) o la plasmaféresis pueden ser eficaces para mejorar la sintomatología de la enfermedad según han demostrado diversos estudios. Para detener la progresión de la enfermedad, los expertos recomiendan la terapia ocupacional y física.
Todo el tratamiento será individual y personalizado atendiendo al pronostico que se ejecute de cada paciente. Habrá algunos cuyos síntomas puedan tratarse con el tratamiento o afectar a una única parte del cuerpo. Sin embargo, puede darse el caso también de que los síntomas aumenten y afecten a los músculos de la cara y otros que puedan estar constantemente rígidos.
