Serena Smith sueña con parecerse a Marilyn Monroe, y para cumplir con su deseo, ha optado por la cirugía plástica. Para ello, ha pasado por el quirófano y también por la cuenta corriente: asegura que se ha gastado más de 50.000 euros en procedimientos.
"Hacerme cirugías me hace sentirme empedrada, me encanta que podamos crearnos a nosotros mismos para poder ser quienes queramos", asegura en declaraciones a New York Post. "Tener la visión en mi cabeza de cómo me veo cobrando vida es extremadamente satisfactorio", asegura.
La joven, que reside en California y tiene relativa fama por haber participado en algún concurso de telerrealidad y alguna canción, comenzó con su primera intervención en diciembre de 2016, cuando tenía tan solo 18 años. Por ello pagó más de 7.500 euros.
Después se sometió a una rinoplastia, que costó 11.000 euros. Con frecuencia, asegura, se suele someter a otros procedimientos menos invasivos como bótox o rellenos en los labios. A ello, sin embargo, le han seguido más intervenciones en las que ha modificado su cuerpo por completo.
"La recuperación de este procedimiento es muy intensa, definitivamente la más dura hasta el momento. Tienes que usar una prenda de comprensión las 23 horas del día durante dos meses y puede ser bastante incómodo", advierte. "Tuve drenajes que recogieron toda la sangre y los fluidos que salían de mi cuerpo durante casi dos semanas, lo cual no fue un espectáculo agradable", rememora.
"Nunca dejaré de operarme"
Con todo ello, Smith asegura que no cejará en su empeño y continuará con sus intervenciones: "Nunca dejaré de operarme. Una vez que complete todo lo que me gustaría hacer y esté satisfecha, estaré feliz y contenta, pero una vez que comience a envejecer, se trata de mantenimiento y de mantener ese aspecto juvenil", ha defendido.
A pesar de haber recibido algunas críticas en redes sociales, la joven se defiende: "No estoy haciendo daño a nadie con mis elecciones. Me gusta difundir posibilidad en mi perfil de Instagram y hacer que sea un lugar seguro para que mis fanáticos y seguidores interactúan conmigo".
Smith cree que sus decisiones no son del agrado de todos, ella defiende: "Cualquier cosa que me ayude a llevar una vida más feliz y segura vale la pena para mí y, como dicen, el dolor es belleza".