Ya se conoce al completo la sentencia contra Daniel Sancho por el asesinato premeditado del cirujano Edwin Arrieta. Se trata de un texto de 47 páginas en el que se detallan todas las conclusiones de la investigación y las resoluciones judiciales.
En el escrito se indica que Sancho "golpeó" a Edwin Arrieta con "intención de matar" al cirujano y que no actuó por accidente. Que "preparó" el crimen con la compra de cuchillos, una sierra y bolsas de plástico y que, por tanto, se le considera culpable de asesinato premeditado. Unos hechos por los que ha sido sentenciado a cadena perpetua.
Las intenciones de cometer el asesinato quedan acreditadas, según la sentencia, en que golpease "la cabeza del fallecido contra el borde del fregadero". De este modo, desmonta los argumentos que la defensa mantuvo durante toda la causa, que sostenía que la muerte fue accidental.
"Las pruebas presentadas tanto por la acusación como por los codemandantes refuerzan la conclusión de que el acusado fue responsable de la muerte de la víctima, aunque no pudieron determinar con precisión la causa de la muerte", señala la demoledora sentencia, que reconoce que la autopsia no fue concluyente porque faltaban partes clave del cuerpo como el tórax. Arrieta fue descuartizado tras su asesinato y sus restos repartidos entre varios puntos de la isla de Phangan, así como arrojados al mar.
Móvil del crimen
Uno de los puntos más destacados de la sentencia se encuentra en el "motivo del crimen" que llevó a Daniel Sancho a perpetrar este asesinato. La sentencia lo establece en que Arrieta no aceptaba que Daniel Sancho pusiera fin a su relación meses antes de su fallecimiento y que amenazara la acusando como "revelar secretos" y matarlo.
"Dado que el acusado había puesto fin a la relación, pero el fallecido se había negado a aceptarlo y había amenazado con revelar secretos y matar al acusado, se cree que este fue un motivo para el acto violento que condujo a la muerte del fallecido", señala la sentencia.
El escrito desmiente que Daniel Sancho actuase en defensa propia ante un supuesto intento de violación de Edwin Arrieta y señala que "queda establecido que el fallecido y el acusado mantenían una relación romántica, que incluía una relación sexual".
"La supuesta negativa del acusado (a mantener relaciones sexuales) se considera infundada e interesada", afirma la sentencia, "esta alegación carece de credibilidad y no se acepta como defensa válida", concluye. Y determina de este modo: "Las acciones del acusado no pueden considerarse defensa propia".
Entre otros aspectos, también señala que la confesión del acusado fue "veraz", una conclusión que sustenta en que "se hizo poco después del incidente" y que entonces "tuvo pocas oportunidades de inventar o falsear los detalles".
Tres delitos
Daniel Sancho está condenado por los artículos 188, 189 y 289(4) del Código Penal de Tailandia, que suponen delitos de asesinato premeditado, ocultación del cadáver y destrucción de documentación ajena, en relación a su pasaporte.
"La pena por ocultar, trasladar o destruir un cadáver o partes del mismo es de 4 meses de prisión. La pena por asesinato con premeditación es la pena capital. La pena por dañar, destruir o sustraer documentos ajenos es de 2 años de prisión", recalca el escrito.
El juez tiene en cuenta que Daniel Sancho se declaró culpable durante el juicio y que colaboro en todo momento con la justicia, por lo que se rebaja el descuartizamiento de 4 a 2 meses de cárcel y el asesinato premeditado a un tercio de la condena, que permite que la pena capital sea conmutada por cadena perpetua.
Además, también se le condena a pagar una indemnización de 4,42 millones de bats (119.000 euros) a la familia de Edwin Arrieta, "con intereses al tipo del 5% anual sobre el importe principal a partir del 2 de agosto de 2023 hasta que se efectúe el pago completo".
