'Operación Triunfo' ya ha vuelto y lo ha hecho con errores que no podía permitirse. Es cierto que la gala inicial de aquel añejo primer 'OT' no fue precisamente perfecta, pero mientras que en el 2001 el público tenía mucho por descubrir, en la actualidad los espectadores están resabiados de concursos, personajes, y galas.'OT 2017' tendría que haber comenzado poniendo toda la carne el asador, dando todo lo prometido, pero no ha sido así. Se esperaba espectáculo, emoción, y por qué no, algún guiño al pasado, un pasado que ha hecho que 'OT' vuelva a tener un presente, porque fue a raíz de 'OT: El reencuentro' que la maquinaria del talent show más importante de la historia de este país volvió a ponerse en marcha.
Hay algo evidente, y es que la televisión necesitaba de nuevo un 'OT'. Ante una de las temporadas televisivas más insulsas que se recuerdan, con un 'Gran Hermano' de capa caída, series que van y vienen, y ningún fenómeno a la vista, con las plataformas de pago en auge, la vuelta de un formato así ilusiona.Pero si algo malo tiene el hype es que las expectativas se ponen por las nubes. Aunque 'Operación Triunfo' tiene mucho potencial, la gala inaugural fue, como la misma directora de la Academia sentenció, catastrófica. Estos fueron los principales errores:
1 El sonido que saboteó la mayor parte de las actuaciones
La gala falló en lo principal: los concursantes no cantaron bien. Aunque 'OT' basa su mecánica en ingresar en una Academia donde ir aprendiendo semana a semana, el sonido no puede resultar molesto en un programa de canto. Y es que, aunque mucha gente desde casa no vio grandes fallos por parte del programa, los concursantes sí lo notaron. De hecho, Aitana, la primera en actuar, ha asegurado durante el visionado de la actuación que "da rabia porque ahí no se nota que la música entró mal". Voces por encima de las bases musicales, coros por encima de las voces... Algo muy malo debió ocurrir para producir ese sonido, cuando 'Tu cara me suena', programa de la misma productora, ofrece una factura técnica impecable.
2 Una apertura descafeinada para un regreso de ese calibre
Cuando los muchos fans de 'OT' se agolparon en el sofá de sus casas para ver el renacimiento del talent,se encontraron en primer lugar con imágenes de los castings, bastante manidos en televisión (la primera fase de 'La Voz' se compone de varias semanas de audiciones a modo casting), y tras esto, una actuación de Mónica Naranjo. Un arranque bastante insulso en el que hizo falta más espectáculo que apelara a la esencia del concurso. Además, los concursantes aparecieron de golpe y sin ningún tipo de presentación que permitiera un vistazo general antes de pasar a la acción. No es que fuese primordial cantar de buenas a primeras el recordado 'Mi música es tu voz', pero se echó en falta algún tipo de inicio casi-épico, como ocurrió en 'OT 2009', con varios ex concursantes de la Academia, incluidos los ganadores, abriendo el show.
3 La incompatibilidad entre las actuaciones y las valoraciones del jurado
¿Hay alguien que desafina sin parar o que está fuera de tono completamente durante toda la actuación? El jurado le daba una oportunidad yle concedía el pase a la Academia. El público se quedó perplejo ante ciertas valoraciones de los miembros del jurado, con una Mónica Naranjo más intensa que de costumbre (y ya es decir), un Joe Pérez-Orive con cierto sabor a Risto Mejide, y un predecible Manuel Martos. La decisión ya estaba tomada, por lo que las actuaciones de la Gala 0 poco sirvieron para determinar quién podía cruzar la pasarela, algo que descolocó por la incompatibilidad entre lo que el público vio (y escuchó) y lo que el jurado dictaminaba.
4 La excesiva duración
Quien esté siguiendo la primera edición de 'Operación Triunfo', subida a YouTube por el canal oficial del programa, se habrá dado cuenta que, sin cortes publicitarios, la gala duraba poco más de dos horas. Ahora TVE no tiene anuncios, pero la duración ha incrementado en más de una hora. Se echó en falta una gala con ritmo y que acabase a una hora prudente para poder seguir los primeros momentos de los concursantes en la Academia con la emisión de 'El Chat', que también sufrió varios fallos técnicos que dejaron descompuesta a su presentadora y directora de la Academia, Noemí Galera.
5 Una pasarela que no se luce y un plató más pequeño
'Operación Triunfo' consiguió crear un plató icónico con elementos completamente reconocibles por el público, elementos que ahora pasan desapercibidos. La pasarela, aunque se ha modernizado, ha perdido la elegancia con el público a pie de pista intentando chocar las manos como en un concierto. ¿Por qué? Lo mejor de aquella amplia pasarela con pastilla de las ediciones del programa en TVE era la elegancia que desprendían los concursantes al pasar por ella. Su tamaño, además, permitía a la cámara captar la emoción de los concursantes, que ahora pasan por ella a trompicones y a toda mecha. Pese a que el plató es más reducido, el escenario, de inspiración eurovisiva, sí trae consigo las nuevas tecnologías para lucirse en pantalla, aunque la realización no siempre lo permitió.
6 'Operación Triunfo', ¿pero triunfo de qué?
Parece que aunque los años pasen, el programa y sus responsables no han logrado todavía reflexionar acerca de esta frase que pronunció Risto en alguna de esas valoraciones, que habrían hecho a Esther Aranda buena en comparación con lo que se vio anoche. Ya el primer día de Academia se ha vuelto a intuir que 'OT' a veces quiere des-enseñar a sus concursantes. ¿Que tienes como referencia a Bowie y cantas con gran personalidad? Pues Noemí Galera te dice que "No puedes cantar una canción de Bowie así". Si el concurso está buscando a nuevas estrellas debería potenciar la personalidad de cada concursante en detrimento de la versatilidad tantas veces exigida. Aún hay esperanza, con profesores como Los Javis (Calvo y Ambrossi), pero si 'OT' vuelve a caer en el error de pedir a todos sus concursantes que sepan hacer de todo (cantar todo tipo de género, bailar, actuar) como si estuviesen buscando al nuevo concursante perfecto de 'Tu cara me suena', volveremos a ver el karaoke más caro de la historia de la televisión en vez de "el mayor espectáculo de la TV" como nos prometieron.
