La muerte de Adolfo Sinaí Núñez Villalobos, un adolescente venezolano de tan solo 15 años, ha conmocionado a todo el Barrio de Libertador, en Venezuela. Según las últimas investigaciones Adolfo había quedado con su amigo, "El Colombianito" -tal y como relata el diario Versión Final-, con el fin de fotografiarse con el arma del segundo.
Al llegar a su casa, y mientras el amigo se dirigía a la cocina, Adolfo cogió el arma y su teléfono móvil para realizar el primero de sus ansiados selfies. Al rato, "El Colombianito" oyó el sonido de un disparo. "Su amigo desde hace varios años lo encontró en el piso moribundo, con el teléfono a un lado y la pistola del otro lado. Esto ocurrió mientras 'El Colombianito' calentaba su almuerzo", ha asegurado Nectáreo Villalobos, tío del fallecido.
El adolescente se disparó accidentalmente en la cabeza, el pasado viernes, al intentar fotografiarse con la pistola calibre 9 milímetros del progenitor de su amigo, conocido como "El Colombianito"
Durante las primeras informaciones, se llegó a sospechar de la autoría de "El Colombianito", puesto que era la única persona que le acompañaba en la casa. "Mi sobrino lo que quería es una foto, sabemos que él mismo se disparó y no fue un homicidio como se dijo antes", ha añadido el tío del fallecido, que ha recordado que ambos eran tan amigos que hasta se intercambiaban la ropa. Mientras tanto, todos en el vecindario recuerdan la memoria de Adolfo, "Bebé", tal y como era conocido.
Esta noticia nos recuerda la conveniencia de la venta de armas y pone de relieve la importancia que actualmente tienen las redes sociales en nuestra vida diaria. ¿Dónde está el límite?