¿Os acordáis de la película de 'La Mosca? En la que un científico que por error se empieza a convertirse en un insecto, mitad mosca y mitad humano. Pues, ahora, unos científicos, liderados por Ali Brivanlou, de la Universidad Rockefeller de Nueva York, han logrado crear un híbrido cruzando células humanas con embriones de pollo. El experimento, tildado de controvertido, se ha publicado en la revista Nature.
El experimento fallido, ya que el "embrión" o el ente murió, parece ser esclarecedor para entender las células organizadoras humanas que determinan qué partes del embrión se convertirán en la cabeza o los pies. Sin embargo, el problema a la hora de estudiar este proceso, es que los experimentos con embriones humanos están establecidos en un periodo máximo de 14 días, y estas células empiezan actuar a partir de ese tiempo. Por lo tanto, no se podría realizar ningún experimento "legal" o "ético".
El hecho de poner un límite en estos experimentos ha evitado que los científicos no sepan qué ocurre exactamente en un embrión en las primeras semanas de su existencia, como confirma Brivanlou a Scientific American. "Nadie sabía lo que sucede después de que una bola de células se adhiera al útero". Una forma de comprobar el hecho de que el ser humano tenga las mismas células organizadoras de otros animales.
Experimiento para comprender la fase de formación del embrión
Este grupo de científicos se ha saltado la regla de los 14 días para poder observar el desarrollo en estas células en pequeños cuadrados de 22 milímetros aproximadamente de ancho. Después gestaron estas en embriones de pollo de 12 horas de edad, el equivalente humano de 14 días de vida.
El experimento arrojó luz sobre las células organizadoras humanas: tras el transcurso se comprobó que estas dirigían a las del pollo para formar un segundo sistema nervioso y estructura espinal. Esto ratificó que los seres humanos también tenemos células organizadoras como otros animales; y, aunque, estos híbridos murieron el grupo de científicos se mostraron exultantes con los resultados. Martin Pera, investigador de células madre del Laboratorio Jackson en Maine, declaró que "hay muchas cosas a las que llevará este sistema".
Estos resultados harán que se pueda comprender qué ocurre en la fase de formación de embriones y los defectos en su formación. Además, también puede ser el primer paso para crear órganos humanos en laboratorios o regenerar los dañados en nuestros cuerpos.