Mohamed bin Salman no ha hecho más que dar una imagen idílica de su Arabia Saudí natal en los últimos meses. Como príncipe y potencial heredero al trono y sucesor de su padre, Salmán bin Abdulaziz, está haciendo todo lo posible para que la comunidad internacional mire con buenos ojos una nación a la que no han parado de acusar por la continua ruptura de los derechos humanos dentro de sus fronteras.
En los últimos tiempos, el viceprimer ministro del país ha estado en el foco de todas las miradas y es que maneja más hilos de los que parece. Con 34 años, una de sus principales estrategias es la de atraer e invitar a estrellas internacionales que hablen bien del país a cambio de una generosa cantidad de billetes e interesantes obsequios. Uno de sus últimos fichajes ha sido la actriz Lindsay Lohan, con la que al parecer ha llegado a contraer una gran amistad, hasta tal punto que incluso ambos han viajado a bordo de la flota aérea del rey saudí.
Sin pruebas fehacientes que confirmen su relación amistosa, el círculo de Lohan asegura que "ambos se conocen" y que incluso han llegado a ver un intercambio directo de mensajes entre ambos. Sin embargo el representante de la artista ha negado los rumores que apuntan a una relación sentimental o a detalles explícitos que hacen referencia a que el príncipe saudí le haya obsequiado con una tarjeta de crédito con gasto ilimitado. Lo cierto es que sí, ambos han coincidido públicamente en una carrera de Fórmula Uno. Además, la neoyorkina estudia árabe y se instaló en los Emiratos Árabes Unidos hace algunos años, por lo que son vecinos.
Lo cierto es que Lindsay Lohan se ha sabido rodear de toda la corte saudí e incluso ha querido ayudar al régimen. Un buen ejemplo de ello es la película 'Frame', con la que quiere exhibir la buena fe del Gobierno al otorgar más derechos a las mujeres. De momento no han trascendido más detalles acerca de su rodaje, ni si finalmente verá la luz. También hay que destacar la fe ciega en el islam de Lohan, pues admite que fue su salvación tras su oscuro pasado. Varios testigos habrían reportado haberla vista por Nueva York con un Corán en la mano. La también modelo es simpatizante de Erdogan, el presidente de Turquía, con el que incluso se ha reunido en su palacio de Ankara.
La última relación sentimental en el palmarés de Lindsay Lohan es la que guardó con el empresario ruso Egor Tarabasov, con el que no acabó muy bien tras una pelea en Mykonos, Grecia.
Cuatro hijos y una esposa
Mohamed bin Salman tiene cuatro hijos, fruto de su relación con su prima Sara bint Mashur bin Abdelaziz. Ambos se casaron en 2008, hace ya más de una década. Si bien es cierto que todo lo que rodea a la familia real saudí no es más que secretismo y discrección, pues ni siquiera se conocen las edades de Sara o de sus descendientes, Salman, Mashur, Fahda y Nura. A pesar de esta relación, fuentes confidenciales revelaron a El Mundo que el príncipe tendría otra relación alterna, junto a otra mujer, la cual mantendría en secreto.
Además de su pasión por la cultura japonesa y la tecnología de Apple, el saudí quiere hacer lo posible por catapultar la tierra que herederá dentro unos años. Para ello, tiene en mente ambiciosos proyectos e infraestructuras multimillonarias con las que pretende posicionar en un lugar privilegiado a Arabia Saudí.
No es oro todo lo que reluce, ya que la prensa apunta a que él y su padre podrían haber estado implicados en el asesinato del periodista Jamal Khassoggi, un corresponsal de The Washington Post que no simpatizaba con los movimientos de la realeza saudí. Del mismo modo, algunos medios de comunicación apuntan a que el príncipe podría querer limpiar su perfil mediático debido a estas acusaciones, aunque la prensa señala que el pasado tan borroso y difícil de la actriz no le beneficia en absoluto.
