La afirmación de que la ropa podría empezarse a hacer de caca de vaca seguro que genera en ti, por una parte asco y por otra expectación. La verdad es que los excrementos de las vacas emanan óxido nitroso a la atmósfera, convirtiéndose en uno de los gases que más efecto invernadero produce.
Esta situación ha sido estudiada por Jalila Essaïdi y ha decidido sacar el lado positivo, si es que lo hay, del estiércol vacuno. Esta emprendedora holandesa ha creado una startup llamada Mestic. Con esta empresa emergente que transforma la materia prima en nuevas materias que pueden ser utilizadas por la industria textil.
Al parecer sí que hay bastantes aspectos positivos en los desechos que todos evitamos, y es que de la caca de vaca se puede conseguir celulosa. Según la información publicada por el diario británico The Guardian, Essaïdi, explica el funcionamiento: "En el estiércol hay una combinación de orina y de caca que es agua en un 80%. Nosotros separamos la parte seca de la húmeda y fermentamos la húmeda para extraer solventes para sacar la celulosa, que no es otra cosa que hierba y maíz ingerido por las vacas".
Este proceso de creación de nuevas materias primas, según la creadora de Mestic, resulta "más eficiente desde el punto de vista energético" que la forma tradicional de la industria textil debido a que no necesitan "alta presión porque el estómago de la vaca es el primer paso para suavizar la fibra".
Las materiales del mañana
La fundación H&M Foundation le ha dado reconocimiento que se merece a lo que está realizando Mestic con el estiércol de vaca. Según Malin Björne, el responsable de comunicación de la fundación, tendremos que acostumbrarnos a materiales originales tan inusuales. "El mundo está consumiendo el equivalente aproximadamente a 1,6 millones de recursos del planeta cada año", por esto hay que buscar nuevas formas de recursos. "Todos vamos a tener que acostumbrarnos a materiales no convencionales", aclaró.
Sin lugar a dudas, es un proyecto eficiente que ayudará al medio ambiente siendo Mestic una solución al "problema global del estiércol de una nueva fuente sostenible y local de materiales biodegradables crudos", según la descripción de la propia startup.