Normalmente el Festivali ï Kënges supone el inicio del año nuevo eurovisivo. La cita navideña de la RTSH albanesa abre la veda de las preselecciones, sin embargo este año ha sido completamente distinto. Que Eurovisión Junior se celebrase en Navidad, unido a que muchos países adelantaron su hoja de ruta para Turín (como el caso de España), ha hecho que la cita de Albania haya pasado más desapercibida que en otras ocasiones.
Sin embargo, el Këngës no ha faltado a su cita, cumpliendo la friolera de 60 años. Siempre involucrado con Eurovisión desde la entrada de Albania en el certamen en el año 2004, de cara a 2022 el jurado albanés ha optado por elegir a la intérprete Ronela Hajati con su tema 'Sekret', un bop étnico de mucha fuerza que cierra las heridas de años anteriores, donde opciones muy movidas se quedaron en la estacada en detrimento de la siempre vistosa pero un tanto manida powerballad albanesa.
Vengando las derrotas del 'Me Tana' de Elvana Gjata o el 'Eja Merre' de Era Rusi, Ronela Hajati presentó el tema que mejor puesta en escena tuvo en Tirana, en una edición de puestas en escena prácticamente inexistentes. En una batalla muy reñida frente a Alban Ramosaj y su balada de gran desempeño vocal 'Theje', Ronela saltó la sorpresa al final, venciendo una batalla que parecía escrita para Ramosaj, el que decepcionó un tanto con su directo e hizo decantar la balanza en beneficio de la portentosa intérprete albanesa.
¿Qué tal es 'Sekret'?
Podemos decir sin miedo a equivocarnos que 'Sekret' es un tema que no te deja indiferente al verlo. Sin embargo, eso no tiene por qué ser bueno en todas las ocasiones. La canción de Ronela Hajati es el bop étnico en su máxima potencia, entremezclando ritmos nativos de Albania con mucho bombo, mucha caja y mucho, mucho baile.
Sin embargo, la sorpresa que te deja al verlo es una mezcla de la potencia del show con elementos inconexos que no terminan de ensamblar del todo. De hecho, en tres minutos (que serán revampeados presumiblemente en inglés) verás a Ronela bailar mucho más que cantar. Empezando con todos los ingredientes de una powerballad, el tema se acaba convirtiendo en una locura de estas que se suele decir que te quita la peluca (de hecho ella no duda en moverla al final de la canción).
Al final, es un tema atractivo, al que sus antepasados le pueden pesar bastante. En un Festivali i Këngës más barroco y clásico que en otros años, resaltó de lo lindo, y tendrá que pasar por el estudio en profundidad para terminar de ser competitiva en Turín.
Nuestra valoración: Potente pero un punto por debajo de lo que pudo ser (7/10)
En resumen, Albania termina apostando por lo que le pedía el fandom de hace un par de años. Luego del drama de 'Me Tana' en 2020 (no hubiera llegado al festival pese a que le hubiera ganado a Arilena Ara), los eurofans reclamaban un bop, el que llega con Ronela Hajati.
Sin embargo, la sombra de los temas del pasado pueden pesarle a una canción pegadiza y atractiva, pero llena de elementos que hacen que sea difícil que capte tu atención por completo. La influencia étnica es total, haciendo que sea un hit or miss, un tema que o te encanta o te horroriza.
Eso en Eurovisión no es malo del todo, y habrá que ver hasta qué punto mantiene su esencia para Turín. Acostumbrados a los grandes revamps de la RTSH, todo parece que acabará dejándonos un tema con partes en inglés, y seguramente un poco más sosegado, sobre todo por las restricciones de participantes en el escenario para Eurovisión. Mientras, la sensación de la canción es agridulce, siendo de esos temas que podrían colarse en la final pero que tenemos que ver los demás para valorar en condiciones.
