El Ayuntamiento de Valencia, con 17 votos del PP y VOX frente a los 16 de PSPV y Compromís ha aprobado el nombramiento de Rita Barberá como alcaldesa honoraria de la ciudad. En el municipio, Juan Carlos Caballero, portavoz popular, ha destacado que "es un día importante para los valencianos" porque se concede a la exregidora la "máxima distinción" de la ciudad.
El diputado también se ha dirigido a la izquierda asegurando que intentará "lincharla en vida y también tras su muerte" porque no fueron "capaces" de ganarle en las urnas. Ha afirmado también que la oposición "tiene complejo porque su gestión no se acerca ni de lejos al legado de Rita Barberá".
El concejal ha declarado que el Consistorio quiere reconocer "el papel de la alcaldesa que fue diputada autonómica en las Corts desde la primera legislatura hasta 2015, presidenta de la FEMP, senadora y alcaldesa de Valencia durante 24 años, que estuvo entregada a la ciudad. Fue este y no otro el cargo más importante que ostentó en su vida, su vocación más plena. Pudo ser muchas más cosas, pero ella siempre dijo que no porque para Rita, Valencia siempre fue el principio y el fin de sus aspiraciones políticas".
Oposición por parte del PSPV y Compromís
La portavoz socialista, Sandra Gómez, ha explicado la posición en contra por parte de su grupo municipal "al considerar que no se está valorando la gestión ni los aciertos o errores de quienes han pasado por la alcaldía de la ciudad, sino si es oportuno hacer alcaldesa honoraria a una persona acusada de corrupción con causas abiertas ante la justicia que no enfrentará al haber faltado".
Por su parte Papi Robles, concejala de Compromís, ha manifestado "lo inoportuno del momento" y ha pedido el aplazamiento de esta distinción hasta que "todas las causas judiciales estén resueltas".
Caballero ha defendido que "es de justicia reconocer el liderazgo femenino y la trascendencia para Valencia que ha tenido", asegurando que con este nombramiento se sitúa a Barberá en "el lugar de la historia que le corresponde".
Además de esta distinción, otra decisión que ha tomado la nueva alcaldesa de Valencia, Maria José Catalá, ha sido la de ponerle su nombre al Puente de las Flores de Valencia. "Valencia siempre va a tener una deuda con Rita. La deuda de quien ha entregado su vida a una ciudad", ha proclamado.
