Corría el año 1962 cuando un jovencísimo don Juan Carlos contraía matrimonio con la princesa Sofía de Grecia y Dinamarca, enlace del que nacerían tres hijos: el actual jefe del Estado, Felipe VI, la infanta Elena y la infanta Cristina. El hoy rey emérito siempre ha gozado del cariño de los españoles, los cuales, durante décadas, no se han cansado de repetir lo "campechano" que era su Borbón. Hasta que llegó el 2012 y todo estalló.
La caza de elefantes de la que "gozó" el monarca en Botswana se saldó con la rotura de su cadera y la destrucción definitiva de su imagen pública en momentos en los que la Familia Real, salpicada por el Caso Nóos de la mano de su hija mediana e Iñaki Urdangarín, atravesaba uno de sus peores momentos. Finalmente abdicó en su hijo en 2014 y, desde entonces, aunque ha tratado de permanecer más alejado del foco mediático, no han dejado de chorrear los escándalos.
Escándalos con faldas. Aunque durante su reinado nunca han acaparado titulares por estas razones, por todos era conocida la debilidad de don Juan Carlos por las mujeres. Su lista de amantes es larga, tanto que incluso se le atribuye algún que otro hijo ilegítimo, siguiendo así con la tradición borbónica.
En mitad de todo eso, claro está, se ha encontrado la reina doña Sofía. La griega ha tenido que soportar multitud de humillaciones por parte de su marido, lo que ha provocado que su relación se haya deteriorado hasta tornarse fría y distante ante el escándalo que supondría el divorcio de dos reyes de España.
Don Juan Carlos "ha recapacitado"
Corinna zu Sayn-Wittgenstein ha sido el último nombre en sembrar el escándalo en la vida de los eméritos. La empresaria alemana, con la que don Juan Carlos acudió a cazar en el país africano, volvió a poner en el punto de mira al "campechano" Borbón al asegurar que la habría usado como testaferro en sus turbios negocios, según las grabaciones del excomisario Villarejo. Esta "amiguita entrañable" parecía así poner fin a la ya de por sí inexistente relación entre los padres de Felipe VI, pero parece ser que ahora don Juan Carlos quiere enmendar sus errores.
Según relata la periodista Carmen Enríquez, el monarca quiere que las cosas vuelvan a ser como antes con su esposa. En su libro publicado sobre la reina Sofía titulado 'Sofía: nuestra reina', narra la tristeza del rey Juan Carlos por la relación tan distante que mantiene con la madre de sus hijos. "Ha recapacitado sobre los acontecimientos en épocas anteriores", señala Enríquez.
La periodista reconoce la "tensión" existente entre los monarcas pero revela que don Juan Carlos se está esforzando "por arreglar las cosas y recomponer una relación" o bien a nivel sentimental o desde el ábito de la cordialidad y en "un buen ambiente".
Basándose en los testimonios de personas cercanas a los padres de Felipe VI, Enríquez asegura que la reina doña Sofía sufre cierta soledad, hasta el punto que don Juan Carlos pide a sus amigos que la inviten a fiestas a las que él también acude, por lo que la griega vería con buenos ojos este acercamiento por parte de su marido.